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El tiempo pasa deprisa. Esta es la impresión que tienen los arroceros de la Albufera que ven con tristeza cómo han quedado los arrozales tras ... el paso de la DANA de hace casi un mes y que ha causado la muerte de más de 200 personas. El temor de los agricultores es que llegue el momento de sembrar en mayo y las infraestructuras no hayan sido repuestas.
Ahora llega el momento de los balances y la preocupación cunde entre los cultivadores que señalan que sólo tienen cinco meses para arreglarlo todo antes de la próxima siembra. Al margen de los objetos y la suciedad acumulada en los campos, se han producido serios daños en las infraestructuras y hay que reparar caminos, acequias, canalizaciones, motas, sifones... y un largo etcétera.
Hay tiempo aún pero hay que aprovecharlo. José Pascual Fortea, delegado de AVA en la sectorial del arroz, explica que «tenemos por delante dos meses para vaciar y arreglar los campos, canales y acequias, porque si no, estarán colmatados de barro y el agua no discurrirá de la parte alta a la parte baja. Vamos a contrarreloj si queremos que los arrozales estén en perfecto estado en abril para iniciar una nueva campaña. De la voluntad política y de los recursos que pongan en marcha depende que el cultivo del arroz y, por tanto, la Albufera vuelvan a la normalidad».
En este sentido, Fortea ha recalcado que la maquinaria no ha llegado a las zonas más afectadas. «En todos los campos que se encuentran en las inmediaciones de los polígonos industriales, la maquinaria aún no ha entrado. Es importante que no se olviden de nosotros», ha recalcado. Y ha añadido que las inundaciones han afectado a muchos campos de hortalizas.
En el mismo sentido se ha pronunciado Manuel Planells, también delegado de AVA y secretario de la Acequia del Oro, que ha señalado que el temporal se llevó por delante un invernadero valorado en 40.000 euros para hortalizas. «Recoger los restos costará aún 10.000 euros más porque hay que cortar hierros y acarrear el hormigón», ha explicado. Además, ha perdido toda la cosecha de garrofón que tenía almacenada. «No ha quedado nada», se lamenta.
Ha indicado que la Conselleria de Medio Ambiente ha comenzado ya las labores de limpieza, mientras que esperan que la de Agricultura proceda al arreglo de los caminos. Por su lado, Tragsa, la empresa dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica, que es la encargada de limpiar y recuperar las parcelas agrícolas todavía no ha empezado a trabajar.
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Planells ha explicado que muchos de los campos de arroz están afectados por las inundaciones con una capa de barro de dos a cinco centímetros «que si no tienen más problemas puede ser hasta bueno». Pero también ha resaltado el riesgo de que se hayan producido vertidos tóxicos que habría que limpiar. «Hay tiempo para que el año que viene haya una producción de calidad», ha opinado. En este sentido, ha recalcado que ya hay tractores fangueando porque se ha pedido que se adelante el secado de los campos para facilitar la búsqueda de víctimas.
La Cooperativa San Pedro de Massanassa también ha sufrido las consecuencias de la DANA. El agua inundó los almacenes y ha provocado la pérdida de entre 1,5 y dos millones de kilos de arroz por un valor estimado de 1,2 millones de euros. Ahora están trabajando para extraer los restos podridos y que están generando malos olores. Según ha explicado el presidente de la Cooperativa, Pascual Lapont, están buscando un vertedero al que poder enviar el material estropeado.
Lapont ha señalado que sí que han podido salvar parte de la cosecha, la que se almacenaba en la parte alta de la nave, que han conseguido enviar a otras dos cooperativas. A estas pérdidas, ha indicado el presidente de San Pedro, hay que sumar los daños que ha sufrido la cooperativa por la inundación.
Por su parte, el conseller de Agricultura, Miguel Barrachina, ha anunciado que «la Conselleria va a adelantar tres millones de euros en concepto de ayudas agroambientales para los titulares de explotaciones de arroz afectados por la riada».
«Es la primera vez que desde la Conselleria se practica un adelanto de estas características. El objetivo es apoyar a quienes han sufrido graves daños en sus explotaciones,» ha añadido Miguel Barrachina.
Asimismo, ha concretado que «los beneficiarios de este adelanto serán los titulares de explotaciones arroceras acogidos a compromisos agroambientales. Durante la próxima semana se anticipará este primer pago a los arroceros, pero también vamos a adelantar el pago a las superficies agrarias ecológicas, zonas con limitaciones naturales, la apicultura para la biodiversidad, así como aquellos con compromisos de conservación de la oveja guirra».
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