Mismo asiento en clase y prohibido permanecer en pasillos

El protocolo contempla diferentes cautelas que ya han interiorizado tanto los estudiantes como el personal, pues eran de aplicación el curso pasado. Por regla general los alumnos deberán ocupar el mismo asiento del aula durante la jornada, y se prohíbe la permanencia en zonas comunes y pasillos dentro de las instalaciones, salvo en espacios habilitados a tal efecto. En los desplazamientos, además, hay que mantener la distancia de seguridad.

Respecto a los asientos en las clases, la presencialidad máxima implica un cambio en algunas facultades donde existan problemas de capacidad, pues se permitirá utilizar aquellos que en principio estén inutilizados para dejar la correspondiente distancia.