Las obras en Manises, un tapón para el tráfico frente al aeropuerto

No a todas horas es lo mismo. Las retenciones son más intensas a primera hora de la mañana, al mediodía o por la tarde, cuando se acumulan los conductores que van hacia su trabajo o finalizan su jornada laboral.

La acumulación de vehículos provoca problemas para los viajeros que intentan acceder al aeropuerto de Valencia o para los que se desplazan hacia Fuente del Jarro. Las molestias son evidentes pero se soportan bien si son para mejorar los accesos.

Es lo que señalan desde la gerencia del polígono industrial de Fuente del Jarro. Indican que las obras de la N-220 se han juntado con los trabajos de adecuación que se están haciendo en la rotonda de acceso a Paterna, el polígono industrial o La Cañada. Pero la espera vale la pena pues ambas fueron demandadas por los empresarios.

«Desde el colectivo de Fuente del Jarro conseguimos que se introdujeran algunas modificaciones en el proyecto. Aunque ahora se están produciendo atascos puntuales, con las molestias que conlleva, pensamos que va a ser en nuestro beneficio porque mejora los accesos al polígono», explican las mismas fuentes.

En este sentido, señalaron que se va a conseguir un enlace directo de la Fase II del polígono con la V-30, «algo que es una reivindicación continua. Pese a que la Fase II está junto a esta arteria no estaba conectada».

Entre las molestias que acarrean estas obras se encuentra, al margen de los atascos, el cierre del puente para ir a Manises lo que obliga a los conductores a dar un rodeo. «Y así vamos a estar un año entero», puntualizan las mismas fuentes pero resaltan que todas estas dificultades «están asumidas porque el beneficio de estas intervenciones son evidentes».

La única pega es que han coincidido los trabajos de la rotonda de acceso a Paterna y de la N-220 lo que ha agravado la situación del tráfico en este punto que se convertirá en un lugar conflictivo los próximos meses hasta que concluyan las actuaciones. Los conductores que van al aeropuerto o a la Fuente del Jarro se van a tener que armar de paciencia al pasar por esta zona sabiendo que cuando terminen el tráfico va a ser mucho más fluido.

Las obras son de duplicación de la calzada y se están realizando en el tramo entre el enlace del aeropuerto y la V-30. La N-220, junto con la autovía V-11, sirve como enlace intermedio entre la autopista A-7 y la ciudad de Valencia. El vial tiene un importante papel a la hora de canalizar el tráfico que proviene de la CV-365.

El objetivo de estos trabajos de remodelación es la desaparición y reconstrucción del actual enlace del aeropuerto y la creación de la nueva conexión de la calle Rosas. Además, se realizarán los trabajos de demolición del actual paso inferior de Manises y se levantará el nuevo túnel con capacidad para dos calzadas de dos carriles cada una. La duplicación de la calzada por el lado derecho servirá para dar continuidad a la vía V-11.

El coste de la inversión es de 85,4 millones de euros y correrá a cargo del Gobierno central. La intervención tiene también como motivo mejorar la fluidez y la seguridad vial en el acceso al aeropuerto de Manises.

La actuación también permite construir un enlace entre la autovía V-30 en sentido by-pass y Manises-Aeropuerto y favorecerá la conexión ciclopeatonal con el aeropuerto al unirse con el casco urbano de Manises con un triple itinerario seguro para viandantes y ciclistas.

Las obras duplicarán la actual carretera N-220 con dos carriles con dos sentidos de circulación que conseguirán contener los atascos en horas punta en este tramo de carretera. Otro de los objetivos de este proyecto es que gracias a que se cubre la calzada de la actual N-220 y el soterramiento del tráfico rodado se reducirá el ruido para los vecinos de la zona. De esta forma, cambiará el paisaje de acceso al aeropuerto de Manises. Se habilitará un sendero peatonal al parque natural del río Turia desde esta zona, creando una nueva ruta circular de paseo que une caminos rurales con las calles del municipio.