Dos acertantes se reparten 204.000 euros en la Primitiva de este sábado
Mavi Mestre, junto a Tomás Trenor y el resto de asistentes al acto este jueves. AECC

El auge de los vapeadores lleva a las universidades a ampliar los espacios libres de humo en sus campus

La Politècnica y la UV firman un convenio con la Asociación contra el Cáncer para luchar contra el tabaquismo y sus nuevos derivados, ya que más de la mitad de los jóvenes entre 14 y 18 años vapean y los de 12 ya lo han probado

José Molins

Valencia

Jueves, 30 de mayo 2024, 16:51

Más de la mitad de los jóvenes valencianos de entre 14 y 18 años usan vapeadores y uno de cada tres ha probado el tabaco. ... Incluso entre los niños de 12 y 13 años, uno de cada cuatro ha probado los cigarrillos electrónicos. Las cifras crecen cada año en la Comunitat y este auge de los nuevos métodos para fumar se impone ya al tabaco tradicional. Un hecho que ha llevado a la Universitat de València (UV) y a la Politècnica (UPV) a firmar un convenio con la Asociación Española Contra el Cáncer en Valencia para ampliar sus espacios libres de humo en sus campus y que se ha anunciado este jueves, en la previa del Día Mundial sin tabaco que se celebra este viernes.

Publicidad

Ambas instituciones valencianas se comprometen a luchar contra el tabaquismo. «El tabaco es la primera causa de enfermedades y muertes evitables en el mundo. Se trata de un problema social que es necesario y urgente abordar. La UV se avanza con este convenio a las medidas que mejorarán la calidad del aire que se respira en todos nuestros campus. Es un paso muy importante que llevamos a cabo para proteger a nuestra comunidad universitaria», ha señalado Mavi Mestre, rectora de la UV. «El apoyo de las universidades es fundamental para evitar que se perpetúen hábitos relacionados con hasta el 30% de casos de cáncer», ha explicado Tomás Trenor, presidente de Contra el Cáncer Valencia.

La media no implicará la prohibición de fumar en las zonas exteriores de ambas universidades, pero sí la recomendación de no hacerlo, como espacio libre de humo, que se sumará a los ya establecidos por la ley, que son todos los interiores de los edificios, los accesos y las aceras perimetrales. En concreto la UPV va a declarar libre de humo «todo el eje central del campus de Vera, desde el edificio de Rectorado hasta la Ciudad de la Investigación y un eje trasversal que iría desde el pabellón polideportivo, pasa por el centro de salud, por las pistas deportivas, por todos los edificios de deportes», ha apuntado Eduardo Bolufer, director de prevención de riesgos laborales y salud de la UPV.

El tabaco está relacionado con hasta 16 tipos de cáncer, es responsable del 84% de los casos de cáncer de laringe y cerca del 90% de cáncer de pulmón, el más mortal que existe en la Comunitat. Además, la Asociación Contra el Cáncer asegura que se ha demostrado que los vapeadores tienen elementos que pueden aumentar el asma, ocasionar enfermedades pulmonares o agravarlas y predisponer a la aparición del cáncer. Pero los jóvenes ya prefieren estas nuevas alternativas, como vapeadores, cachimbas o cigarrillos electrónicos más que el cigarro tradicional.

Publicidad

Sustancias tóxicas

«Los jóvenes valencianos ya consumen más vapeadores que tabaco. Existe una percepción generalizada de que los vapeadores sin inocuos y por eso van ganando terreno, pero no lo son», explica Trenor. «Que tenga menos sustancias tóxicas no significa que el daño sea menor. El aerosol puede contener nicotina y toxinas cancerígenas que, al inhalarse, quedan atrapadas en los pulmones y provocan efectos perjudiciales para la salud», añade el presidente de la asociación que ha promovido estos convenios con las universidades.

Para Bolufer la intención de la UPV no es la vía de prohibir fumar. «Hay otro camino, que es el que queremos fomentar, que la gente asuma su responsabilidad y nos comprometamos todos. Los fumadores deben ser conscientes de que quien no fuma tiene derecho a respirar un aire limpio, pero también queremos ayudarles a que reduzcan su hábito tabáquico con estos espacios sin humo. Además estamos formando a profesionales del futuro y todo lo que podamos plantar en su mentalidad y sus hábitos luego tendrá un recorrido en su vida que podrán trasladar a sus entornos», dice el dirigente de la Politècnica.

Publicidad

En el acto también se ha dado voz a una representación de los estudiantes universitarios, en cuyo manifiesto han mostrado el compromiso de luchar «por la primera generación europea libre de tabaco en 2030», en un objetivo con vistas a seis años. «Queremos erradicar el tabaquismo de nuestras vidas, exigimos espacios libres de tabaco, tenemos derecho a vivir en un ambiente saludable que no perpetúe adicciones. No nos quedaremos de brazos cruzados mientras el tabaco y sus nuevos productos continúan devastando vidas», han declarado.

No sólo desde estos sectores se alerta de este auge del humo entre los jóvenes. La Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap) también avisa de la banalización del vapeo entre los niños y adolescentes, ya que más de la mitad de los jóvenes de 14 a 18 años reconoce haber probado cigarrillos electrónicos. Los profesionales destacan que desde edades más tempranas se encuentran «vapeadores en las mochilas» en los centros educativos.

Publicidad

La Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) asegura que las nuevas formas de consumo tabáquico como el vapeo, tan extendidas entre los jóvenes, se posicionan como «una potencial causa de cáncer de pulmón que se traduce en la aparición de esta enfermedad incluso con menor tiempo de exposición que con el tabaco convencional». A SEOM le preocupa especialmente la generalización del uso de cigarrillos electrónicos entre los jóvenes «porque representan la puerta de entrada al tabaquismo» y el tabaco es el principal factor de riesgo evitable para el cáncer de pulmón ya que es responsable de un 33 por ciento de los tumores y de un 22 por ciento de las muertes por cáncer, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Además, la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL-CCC) también pone sobre la mesa el riesgo de sufrir cáncer de cabeza y cuello por consumo de cachimbas al tiempo que urge a legislar sobre este hábito, que está aumentando entre los jóvenes. El 40% de los adolescentes españoles entre 14 y 18 años ha fumado cachimba en el último mes. E incluso, el 9,5% de los alumnos de 12 y 13 años reconoce haber usado estos artículos alguna vez en su vida. Según las investigaciones, el humo inhalado durante una sesión de una hora de cachimba equivale a unas 200 veces el volumen de un solo cigarrillo.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete a Las Provincias al mejor precio: 3 meses por 1€

Publicidad