El gel que brilla cuando desinfecta

Como Jack Nicholson en 'Mejor Imposible' esquivando hasta las juntas de las baldosas, antes de la pandemia a ese tipo de personas se les podía calificar de obsesivos, cuando ahora tan sólo son precavidos.

Quién diría antes del estallido del Covid y de comprobar la rapidez con la que se puede contagiar una enfermedad infecciosa que íbamos a priorizar tanto algo tan cotidiano como lavarse las manos, o más aún, llevar incluso entre los enseres o pertenencias gel desinfectante o hidroalchólico, algo que entonces sólo se veía en hospitales, clínicas o farmacias.

La prevención, es en eso en lo que se traducen estos gestos que desde la comuniad médica nos instan a repetir asifuamente. Los geles hidroalcohólicos y otras soluciones higienizantes se han convertido hoy en un elemento más de la rutina diaria de cualquiera.

Los expertos han demostrado que la desinfección de manos con estos productos ayuda a prevenir la transmisión de enfermedades infecciosas, como el Covid. Sin embargo, se estima que el 89% de la población deja algún área incorrectamente desinfectada en sus manos tras la aplicación del gel, lo que puede suponer un riesgo de proliferación de patógenos y otras bacterias.

Este alto porcentaje llamó la atención de investigadores del Centro de Tecnología Nanofotónica, instituto de investigación de la Universitat Politècnica de València (UPV), y para ayudar a reducir este riesgo, han desarrollado un gel hidroalcohólico que brilla para comprobar el grado de desinfección.

Se trata de un gel luminiscente que permite determinar la calidad de la desinfección de manos por luminiscencia y además ya está patentado por la Politécnica, es el principal resultado del Proyecto LEGO, que ha contado con la financiación de la Agencia Valenciana de la Innovación (AVI) y el apoyo de la Generalitat Valenciana.

Y es que la tecnología valenciana está mirando al futuro tratando de dar soluciones y también facilidades a aquellos problemas o inconvenientes a los que se enfrenta la sociedad a diario. Los investigadores valencianos consiguen así podicionarse y situarse frente a la comunidad tecnológica y de las ciencias de la innovación como pioneros y emprendedores ante los nuevos retos.

¿Cómo lo han desarrolado? El gel incorpora partículas luminiscentes totalmente seguras, según informaron desde la Universidad. Así, gracias a estas partículas se cumple con un doble fin, el de higienizar y con el de monitorizar el grado de desinfección de forma inmediata, segura, sencilla, económica y rutinaria, pudiendo emplearse de forma general en los accesos a cualquier establecimiento, garantizando la seguridad de todas las personas que allí acceden.

Aunque pueda parecer inlcuso un juego, con la aplicación de este gel es posible reconocer de manera visual e intuitiva las zonas incorrectamente desinfectadas mediante una lámpara de luz ultravioleta, sin necesidad de complejos dispositivos ni personal especializado, aunque desde el Centro de Tecnología Nanofotónica reconocen que sería compatible con dispositivos fotónicos más sofisticados capaces de obtener y procesar la señal de luminiscencia, ofreciendo datos estadísticos de la limpieza de manos. Pero que para el uso cotidiano no sería necesario emplearlos.

«El Proyecto LEGO ofrece una solución potencialmente aplicable a distintas superficies y espacios de nuestra vida diaria para prevenir la transmisión de enfermedades, avanzar en la desinfección de patógenos y minimizar las infecciones intrahospitalarias», destaca David Ortiz de Zárate, investigador del Centro de Tecnología Nanofotónica de la UPV.

El investigador explica que el desarrollo de este gel ha sido a partir de «la combinación de nanomateriales y fotónica que nos permite contar con una solución eficiente y completamente inocua para las personas, que asegurará una correcta higienización de manos incluso fuera del ámbito sanitario».

Porque para él con esta aplicación se puede inlcuso garantizar «la seguridad en accesos a establecimientos, y permitirá la desinfección inteligente de espacios tan importantes como son los Centros Sanitarios y sus bloques quirúrgicos», destaca David Ortiz de Zárate.

La tecnología desarrollada por el Proyecto LEGO, que permite un refuerzo de la higienización con monitorización instantánea, se plantea además como una solución para distintos entornos y ámbitos sociales, económicos y sanitarios.

Superficies como calzado, suelos, paredes de cualquier tipo de establecimiento, especialmente hospitales o centros públicos, son otras posibles áreas de aplicación de este gel.

Según explican los propios investigadores, también destaca como potencial campo, la realización de recubrimientos luminiscentes autolimpiantes, por medio de radiación infrarroja, complementaria y más económica que la radiación ultravioleta, empleada más habitualmente.