Las casas donde vivía el presunto homicida en Manuel y l'Olleria siguen precintadas

La casa que tenía alquilada en Manuel el descuartizador confeso de Marta Calvo continúa precintada. Desde el registro que realizaron los investigadores de la Guardia Civil el 17 de diciembre en presencia del detenido, «nadie ha vuelto por aquí», asegura una vecina de la calle Juan Bautista.

También sigue precintada desde el 28 de noviembre la otra vivienda donde residía el presunto homicida en la localidad de l'Olleria. «Nadie se ha puesto en contacto con nosotros después del registro», afirma el propietario. En la vivienda aún se encuentran los enseres y objetos personales del detenido, a excepción de los efectos que se llevaron los agentes. El dueño de la casa iba a alquilarla a otro inquilino, pero tuvo que rescindir el contrato. «Estoy perdiendo dinero porque tengo mi trabajo, pero también vivo de alquilar viviendas», lamenta el hombre.

Más difícil para poder alquilar o vender su vivienda lo tiene el propietario de Manuel. «Con toda la inversión que hizo para rehabilitarla y para poder tener unos ingresos para su familia, y ahora ¿quién va a querer vivir allí con lo que ha pasado», pregunta una vecina.

Tras varias semanas de conmoción por la muerte y desaparición de la joven, los vecinos de Manuel retoman poco a poco la tranquilidad tras celebrar estos últimos días las fiestas de invierno, aunque el trágico suceso sigue siendo tema de conversación. «Manuel es un pueblo tranquilo. Es muy triste que venga alguien de fuera y nos ponga en el mapa negro de España por un crimen», señala otra vecina.

Existe preocupación también por el caso de Elena Raducanu, la mujer embarazada degollada en su casa de Xàtiva, y la extraña desaparición de Wafaa Sabbah, la joven de la Pobla Llarga, diez días después de la muerte Marta.