La CHJ retoma el plan para conectar el Poyo con el nuevo cauce junto a Paiporta
El organismo inicia trámites para una vía verde que aliviará los caudales en caso de inundaciones con un plan similar al de la Saleta
La Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) ha retomado el proyecto para la construcción de una vía verde, denominación utilizada por la entidad para una ... conexión, en este caso entre el barranco del Poyo y el nuevo cauce del Turia. El punto de salida sería una zona intermedia entre los cascos urbanos de Picanya y Paiporta en dirección al Plan Sur con un ligero desvío hacia el norte.
Ese fue uno de los temas tratados en una visita de obras realizada a Catarroja y Massanassa por técnicos de la entidad encabezados por su presidente, Miguel Polo. Tanto la alcaldesa Lorena Silvent como su homólogo Paco Comes demandaron la limpieza de la desembocadura, con el fin de darle al barranco una mayor capacidad de desagüe hacia la Albufera, y ahí es donde surgió la novedad de que la confederación ha vuelto a poner en agenda la conexión con el nuevo cauce, desestimada en su día al chocar con el Plan de Protección de la Huerta.
Esta normativa ya ha sido modificada, con lo que la vía verde del Poyo comenzará a tramitarse. Otra, la que conecta el barranco de la Saleta con el Plan Sur, está ya mucho más adelantada y a punto de salir a exposición al público. Los tres ayuntamientos que más se beneficiarán, Alaquàs, Aldaia y Xirivella, apoyan sin fisuras esta infraestructuras, para la que en cambio Valencia ha mostrado reticencias porque no incluye una revisión del propio Plan Sur. El gobierno municipal de María José Catalá quiere garantías de que no se desborde en caso de otra dana.
En el caso de la conexión del Poyo, pasará sin duda por una revisión para dotarla de más capacidad, al igual que ha pasado con la anterior. En todo caso, el proyecto original señala que el cauce tendrá una longitud de 2.270 metros. En el mismo documento se indica que el barranco tiene un aforo de 800 metros cúbicos por segundo aguas abajo de Paiporta, por lo que consideran que al menos deben derivarse a través de la nueva conexión otros 700 metros cúbicos por segundo. Eso en el plan inicial que ahora revisarán los técnicos a la vista de lo que sucedió el pasado 29 de octubre, con una cifras en las inundaciones totalmente por encima de cualquier proyección.
«El desvío de parte de los caudales del barranco del Poyo desde Paiporta hasta el cauce nuevo del Turia era uno de los siete proyectos en los que se dividió el estudio básico de soluciones para mitigar el riesgo de inundación en la cuenca del Poyo, al igual que el desvío del barranco de La Saleta», mencionaron desde la Confederación del Júcar.
«Actualmente, se está ultimando un pliego para que el Ministerio para la Transición Ecológica y del Reto Demográfico licite un contrato con el objetivo de actualizar estos proyectos. En el caso del proyecto de desvío de la Saleta está bastante más avanzado y se prevé licitar las obras este año», precisaron.
A falta de que se precise más con la actualización de los datos, la voluntad es que estas conexiones incluyan carriles bici, sendas peatonales y plantaciones en los taludes con zonas verdes inundables. El programa se completa con otra vía verde para el Pozalet, en este caso con una longitu superior a los nueve kilómetros aguas arriba de Loriguilla hasta llegar a su conexión con la Saleta, con una capacidad de 240 metros cúbicos por segundo. Estas infraestructuras, además de otras en la provincia, necesitarán de la construcción de nuevos puentes y pasos peatonales.
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