Una tesis doctoral por 1.600 euros

Estas páginas se mueven en el limbo de la legalidad. Como lamenta José Pedro García Sabater, el vicerrector de Planificación, Oferta Académica y Transformación Digital de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV), lamenta: «Desde un punto de vista legal no hay nada que hacer, dado que si es un plagio hay derechos de propiedad intelectual».

García asevera que, una de las únicas maneras que hay para poder detectarlo es que la persona encargada de realizar dicho trabajo no lo haga de manera correcta y las herramientas antiplagio puedan detectarlo. En palabras del vicerrector de Planificación, Oferta Académica y Transformación Digital de la UPV: «Se trata de un tema de honestidad académica». En caso de que el personal docente sepa que el trabajo no lo ha realizado el alumno se abriría un expediente disciplinario pues este hecho está considerado como falta grave. Las páginas que venden trabajos académicos no se esconden ni temen en publicitarse. No es difícil encontrar una empresa que se dedique a realizar trabajos universitarios. Los resultados son infinitos y en la mayoría de las páginas hay un formulario para poder pedir el presupuesto.

Sin embargo, LAS PROVINCIAS ha contactado con varias webs que no querían explicar a los medios de comunicación el proceso que realizan para confeccionar los encargos. Sólo cuando este periódico se dirige a ellas bajo el pretexto de querer comprar una tesis doctoral es cuando dan la información sin ningún tipo de reparo. El procedimiento es muy sencillo. El estudiante tiene que cumplimentar un cuestionario en el que adjunte la guía docente con las instrucciones a seguir para la realización de la tesis.

A partir de ahí, también hay que aportar otro tipo de datos como la cantidad de páginas solicitadas, la normativa del proyecto o cualquier tipo de comentarios adicionales. Un asesor explica que los precios para comprar una tesis doctoral oscilan entre los 8 y los 12 euros por folio. Teniendo en cuenta que, por norma general, las tesis deben tener entre 200 y 400 folios, en su formato más básico cuesta 1.600 euros.

«Aseguramos que el trabajo estará aprobado. Otra cosa es el momento en el que el cliente tenga que defender la tesis delante del tribunal compuesto por el profesorado y suspenda», explica el asesor de una de las empresas. La defensa es un momento crucial para la calificación de este tipo de tareas universitarias. El vicerrector de Planificación, Oferta Académica y Transformación Digital de la UPV destaca: «Tras la defensa, el alumno se somete a un turno de preguntas y repreguntas. En ese momento y con el informe escrito que ha hecho e profesor, el tribunal podría detectar la no autoría del trabajo». García asegura que si se dieran estas circunstancias, el tribunal del profesorado podría resolver suspendiendo el acto y pidiendo que se rehaga. «Como es difícil de demostrar, la comisión suele gestionar como lo haría en otros casos de conflicto académico», cuenta José Pedro García. Pero las empresas que se lucran del estrés estudiantil lo tienen todo más que pensado.

El asesor de una de las páginas explica: «El pago puede estar fraccionado hasta en diez plazos diferentes. En cada uno de los pagos que se realicen, iremos enviando una parte del proyecto para que la supervise el tutor y poder incorporar las correcciones que haga». Además, es un especialista en la materia el encargado de hacer estos trabajos. Dentro del servicio también se incluye que la persona que realice la tesis doctoral tenga tutorías con el cliente y le explique todo el procedimiento para evitar que se quede en blanco cuando le realicen las preguntas. No es algo nuevo que los alumnos traten de buscar la vía más fácil para quitarse de encima sus obligaciones académicas. El vicerrector de Planificación, Oferta Académica y Transformación Digital de la UPV comenta: «Las carreras técnicas siempre han tenido proyectos fin de carrera y la tentación de comprar el trabajo siempre ha existido».

Dependiendo del grado universitario, hay casos en los que es prácticamente imposible beneficiarse de otra de las ventajas que supone tener poder adquisitivo. Muchos de los trabajos son memorias de aplicación que se han hecho en laboratorios bajo supervisión o en empresas. Esto dificulta que sea alguien externo quien lo lleve a cabo. Sin embargo, los vendedores de tesis doctorales dan total seguridad a sus clientes del éxito de su compra e incluyen también un informe antiplagio como garantía. El precio varía si es el vendedor el que proporciona el tema del trabajo. Y del plazo. «Podemos tenerlo listo en una semana», asegura el asesor.