El Consell, abocado a un decreto para pagar las ayudas a los comercios

El decreto fue aprobado el pasado viernes por el Consell y se publicó el martes en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana. De esta forma, en el texto para la convocatoria de ayudas a los comercios se ha introducido la modificación que ha hecho que los afectados puedan dormir algo más tranquilos.

En el artículo 9 apartado tres se señala que «se consideran apoyables las inversiones realizadas desde el 1 de enero de 2022 hasta el 25 de enero de 2023». En el límite del tiempo se ha conseguido aliviar la presión que sufrían todos estos comercios. Con esta decisión cerca de medio millar de establecimientos que se acogieron a estas ayudas podrán finalmente cobrarlas.

La Conselleria de Economía publicó en junio del año pasado una convocatoria de ayudas a los comercios dentro del programa 'Avalem comerç' a las que se unieron otras de 'Avalem Artesania'. Estas subvenciones permitían a los propietarios de los establecimientos acometer obras para mejorar sus establecimientos. Al final, cientos de comerciantes se habían quedado sin recibir estas cantidades después de realizar una inversión de varios miles de euros.

El problema no era otro que el que no había suficientes fondos en la partida presupuestaria para hacer frente a estas ayudas. Un nuevo conflicto entre consellerias gestionadas por distintos partidos. Por un lado, la de Economía en manos de Compromís y, por otro, la de Hacienda con el PSPV.

Se intentó una modificación presupuestaria antes de que finalizara el año pero al final el Consell ha recurrido a un decreto y al desplazamiento de las ayudas a los presupuestos de 2023. De esta forma, podrán cobrar estas ayuda directamente.

Y es que sólo en el Gremio de Panaderos se habían hecho inversiones en locales que rondaban el millón de euros esperando que la Conselleria de Economía se hiciera cargo del coste del 75% de las reformas.

Las ayudas se dirigían a mejorar las instalaciones, a comprar nueva maquinaria para modernizarse, a poner en marcha medidas de ahorro energético, a promover la venta online o incluso, en el caso de 'Avalem Artesania', a sustituir la maquinaria de los obradores.

Esta oportunidad en forma de subvenciones llevó a que muchos comerciantes se decidieran a solicitar las ayudas y acometieran las mejoras de sus locales con inversiones que ascendían a varias decenas de miles de euros.

Además, estas ayudas suscitaron un gran interés por las ventajas que aportaban respecto a otras convocatorias. La Conselleria de Economía se comprometía en esta ocasión a pagar también la obra civil, algo que en años anteriores no se había hecho.

De esta forma, la convocatoria señalaba que se pagaría el 75% de la inversión hasta un máximo de 40.000 euros cuando en ediciones anteriores la ayuda únicamente cubría el 50%.

Todas estas ventajas animaron a propietarios de establecimientos a meterse en obras. Desde el Gremio de Panaderos señalaron que numerosos empresarios realizaron las obras en el mes de agosto para aprovechar el cierre estival por las vacaciones.

Si el Consell no hubiera concedido estas ayudas la situación podría haber sido dramática para muchos propietarios hasta el extremo de que algunos se habrían visto obligados a cerrar sus negocios. Ahora pueden respirar tranquilos con la decisión de la Conselleria de Economía.

Estas ayudas fueron convocadas en el contexto provocado por la crisis del coronavirus y por la invasión de Ucrania por parte de Rusia. El precio de los ingredientes se ha disparado hasta el extremo de que algunos establecimientos han pasado de pagar 1.500 euros de luz al mes a ocho mil.