El Consell habilita en Sagunto una nueva fragmentadora de coches ante el colapso de los desguaces

El departamento dirigido por el conseller Vicente Martínez Mus ha emitido una resolución con la que pretende autorizar una instalación fragmentadora de la compañía José Jareño S.A. en Sagunto a prestar sus servicios a los coches damnificados por el desastre.

La Ley 7/2022, de 8 de abril, de residuos y suelos contaminados para una economía circular contempla una disposición adicional para agilizar los trámites de esta índole en 'situaciones de emergencia'. Dicho apartado avala modificar las autorizaciones ambientales y de otro tipo «que puedan ser necesarias para una adecuada gestión de los residuos se llevará a cabo de oficio por la administración autonómica, previa audiencia del titular de la instalación donde se lleve a cabo dicha gestión, como único trámite».

Mediante la citada resolución, Medio Ambiente modificará de oficio la autorización ambiental integrada para que la fragmentadora saguntina esté operativa «como muy tarde el 7 de enero», según informan fuentes del área de Martínez Mus.

El permiso otorgado a esta empresa viene a reforzar las otras dos autorizaciones ya existentes dentro del operativo para tratar la inmensa cantidad de 128.000 vehículos destrozados por la riada. Hasta la fecha sólo estaban en funcionamiento las plantas fragmentadoras de Ferimet en Sollana y la de Megasa en Silla. Ambas instalaciones tuvieron que dejar de estar en marcha durante unos días por el exceso de material que tenían que reciclar.

Una de las grandes ventajas operativas que tendrá la activación de la fragmentadora de José Jareño S. A. es que la misma firma posee un CAT (centro autorizado para el tratamiento de vehículos) en El Puig, una población situada a unos 14 kilómetros de Sagunto, una distancia que se traduce en menos de 20 minutos para realizar el trayecto en coche.

Según define la propia web de José Jareño S. A., su planta fragmentadora ubicada en Sagunto tiene como finalidad «el procesado de vehículos descontaminados, residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE'S) y otros elementos con el objetivo de convertirlos en fracciones y separar las férricas de las no férricas».

La propia compañía resalta que la fragmentadora permitirá completar y mejorar el proceso de separación de materiales que componen los vehículos «con el compromiso de mejora continua, con un enfoque a la sostenibilidad y una participación del proceso de economía circular».

Cabe recordar que Medio Ambiente ya tomó cartas en el asunto tras ampliar la capacidad de los desguaces «para facilitar la gestión urgente de vehículos siniestrados» el pasado 31 de octubre.

El escrito firmado por la Dirección General de Calidad y Educación Ambiental facultaba a los centros de desguace valencianos «a realizar acopios temporales de los vehículos afectados por la situación de emergencia en el recinto de sus instalaciones autorizadas y, en su caso, en las áreas limítrofes y accesibles de tales instalaciones (como parcelas y solares)». Es más, la resolución resaltaba que esto se llevará a cabo «con independencia de las condiciones relativas a la capacidad de tratamiento y de recepción de los residuos».

Eso sí, desde el área encabezada por Martínez Mus impusieron como condición que no se interrumpiera el tráfico de otros vehículos por las inmediaciones de los recintos de almacenamiento.