Los contagios masivos ponen en alerta a las residencias de mayores de la Comunitat

El coronavirus avanza sin freno tanto en España como en la Comunitat y expande la pandemia por todo el territorio sin hacer distinciones de edad. Pero esta situación no quiere decir que la enfermedad afecte igual a todo el mundo ya que en colectivos como el de los ancianos tiene una peligrosa incidencia ya que la mayoría de las personas mayores cuentan con otras patologías previas que complican la recuperación del paciente afectado. Ante las dificultades de contener el coronavirus en lugares donde se concentran ancianos como las residencias, la conselleria de Sanidad decidió ayer intervenir y anunció que se hará cargo del control de las instalaciones públicas y privadas en donde se detecten infectados tras confirmarse ya cinco fallecidos.

En los centros de las tres provincias valencianas se han extremado todas las precauciones para evitar situaciones como las que se han producido en dos focos a los que se controla de forma especial. De ellos, el que más preocupa es el de Torrent. En la residencia de ancianos de Santa Elena saltaron las alarmas el martes de la semana pasada, el último día que tuvo lugar una mascletà y la jornada en la que se anunció que las Fallas quedaban pospuestas, y desde entonces la situación no ha dejado de empeorar. La docena de infectados con los que se contaba en un primer momento ha pasado a 4 fallecidos, 47 casos positivos, 5 de ellos ingresados en un hospital, y 16 residentes pendientes del resultado de las pruebas, según los datos de la propia conselleria de Sanidad. Los últimos días han sido muy complicados ya que la mitad del personal del centro también ha contraído la enfermedad o se encuentra aislado, por lo que la plantilla se ha visto mermada pese al apoyo de las administraciones. En la residencia de Alcoy ha fallecido otro anciano y están aislados con síntomas en estos momentos un total de 58 personas. Se está a la espera de realizarles la prueba para verificar cuántos están contagiados.

Esta situación ha desbordado a los dos centros, cuyo personal se veía incapaz de hacer frente a la enfermedad pese a que han tratado de aislar a las personas que tenían síntomas como fiebre, tos o deficiencias respiratorias. En un primer momento las autoridades sanitarias apostaron por reforzar las plantillas con médicos, enfermeras y auxiliares pero ayer se decidió dar un golpe encima de la mesa para que la pandemia no fuera a más. Hoy mismo saldrá publicada una resolución por la que el departamento encabezado por Ana Barceló pondrá bajo su control y protección a aquellas residencias, públicas o privadas, en las que haya un brote de coronavirus. De este modo, el personal sanitario dependiente de la conselleria podrá tomar cuantas medidas considere necesarias dentro de la residencia para el control y el tratamiento de la pandemia, y tendrá plenas facultades en el ámbito sanitario sobre el conjunto del personal adscrito a los centros.

Ante un brote de coronavirus en una residencia, se designará a un responsable del propio departamento de salud, que tendrá los medios materiales y humanos para hacerse cargo de la asistencia. Según Barceló, la administración tendrá plena capacidad de inspección en todas las residencias para evaluar la situación, verificar que se cumplen los protocolos sanitarios y de seguridad y tomar las medidas oportunas, dirigidas a la adecuada atención sanitaria sin perjuicio de las competencias que correspondan a la conselleria de Igualdad y Políticas Sociales, departamento encabezado por Mónica Oltra del que dependen las residencias.

Tal y como destacó la consellera de Sanidad, "estas situaciones son especialmente preocupantes, tanto en la Comunitat Valenciana como en el conjunto de España", por lo que "ante estos brotes debemos extremar las precauciones y centrar todos nuestros esfuerzos en contener el virus, pues nos encontramos ante personas con mayor vulnerabilidad y son espacios de convivencia y de contacto entre ellos".

Desde las residencias que no han sido afectadas informan que han extremado los controles sanitarios y de seguridad y esperan que la enfermedad se pueda contener para que no llegue a otros centros. Además se quiere evitar que surjan falsas alarmas como la que tuvo lugar ayer en una residencia en Elche. Sanidad ayer informó, tras sospechar que había tres personas con síntomas de coronavirus, que había sido un error ya que las pruebas resultaron negativas.

La Asociación Empresarial de Residencias y Servicios de Atención a la Dependencia de la Comunidad Valenciana (Aerte) y los trabajadores del Instituto Valenciano de Acción Social (Ivass), la entidad responsable de la atención sociosanitaria en centros de mayores y personas dependientes, reclamaron ayer que se les suministre el material necesario para atender a los ancianos de sus instalaciones.

Los casos de Torrent y Alcoy han hecho reaccionar de forma contundente a la plantilla de los centros públicos y privados, que durante el día de ayer se movilizaron a través después de trasladar su malestar a las autoridades. "La situación que se había producido recientemente en la Residencia de Torrent, con una aportación de recursos escasas y tardía hasta última hora, había generado mucha preocupación en el sector" declaró el presidente de Aerte, José María Toro.

"El sector de atención a la dependencia lleva semanas tomando medidas para prevenir el contagio de personas por el coronavirus y el resultado, hasta ahora, ha sido muy bueno" afirmó Toro, que indicó que se ha colaborado "para evitar el colapso del sistema sanitario y estamos satisfechos de nuestra aportación pero si no se produce una respuesta responsable por parte de la conselleria de Sanidad en las próximas horas, estaremos abocados a una situación complicada".

De forma similar se pronunciaron desde las residencias públicas. Tal y como denunciaron los trabajadores del Ivass, "no se está tomando ninguna tipo de medidas" y destacaron que continúan los turnos de mañana, tarde y noche," donde el personal entra y sale de las residencias sin apenas ninguna medida de prevención". Además, criticaron que no se les proveído de más material que el que suele ser habitual y echan en falta mascarillas y otros productos higiénicos.

Esta situación no solo ha sido denunciada por trabajadores a nivel particular sino por el comité de empresa y los sindicatos con representación emitieron ayer un comunicado conjunto en que pedían más medios y protección a Oltra. La preocupación de los trabajadores es que puedan contagiarse del coronavirus y extenderlo cuando realizan su trabajo, que requiere el contacto directo con ancianos. Además de estas denuncias, el sindicato CSIF destacó que no se ha incrementado la limpieza en las residencias públicas de la Comunitat y que en Carlet, Aldaya o Silla la limpieza es la misma del resto de días.