Jueves, 27 de septiembre 2018, 00:53
El conflicto abierto entre las Hermanas Terciarias Capuchinas, gestoras del centro de Segorbe cerrado por el Consell, y la Generalitat sigue vigente. Después de que un juzgado haya archivado el caso de abusos y que la fiscalía determinara que no había maltrato, como publicó ayer LAS PROVINCIAS, el recurso contencioso interpuesto por la congregación contra la decisión de la conselleria sigue aún pendiente de respuesta.
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Las religiosas, en una rueda de prensa convocada tras la retirada de su concesión, anunciaron incluso una querella contra Mónica Oltra por «dañar el buen nombre y el honor del conjunto de los trabajadores del centro», como indicaron. Esta acción judicial no fue finalmente iniciada.
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