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La crisis y la inflación está dejando a las familias numerosas estranguladas. Con grandes problemas para llegar a final de mes ante el aumento ... de los precios. Tres de cada cinco familias numerosas de la Comunitat viven con unos ingresos de menos de 2.500 euros mensuales, lo que se traduce en 500 euros por persona, rozando las cifras que se consideran como umbral de la pobreza.
Así lo refleja el II Estudio sobre la situación económica y social de las familias numerosas de la Comunitat, realizado por Fanucova y que se ha presentado este miércoles en Valencia. El análisis expone que las familias no han visto prácticamente aumentar sus ingresos, en cambio los precios sí se han incrementado notablemente en el último año por la inflación. Hay 78.000 familias numerosas en la región que dispongan del título acreditativo y la gran mayoría tienen problemas económicos.
De hecho, según este estudio, el 70% de estas familias no tiene capacidad de ahorro, ni siquiera para hacer un pequeño colchón de cara a cubrir algún imprevisto, y con sus ingresos apenas pueden llegar a final de mes. Para 8 de cada 10 supone un gran problema administrar el dinero para que cubra todos los gastos mensuales. De hecho, el 23% admite que tiene grandes dificultades para llegar a final de mes o incluso necesita pedirle ayuda a familiares o amigos, un 9,7% tiene que echar mano de créditos para obtener dinero en esos últimos días mensuales y casi la mitad (46%) vive muy ajustado económicamente para mantener a una familia numerosa valenciana.
«La situación de necesidad sigue siendo muy patente. El esfuerzo y el trabajo de las familias numerosas es enorme, somos profesionales en el reajuste de gasto, porque ni los salarios ni las ayudas públicas han aumentado, pero los precios han subido mucho. Estamos a la cola de Europa en ayudas», critica Celia Chavero, directiva de Fanucova. De media las familias numerosas están compuestas por tres hijos (65%) y la edad de los padres oscila entre los 31 y 44 años. «Las familias han ido perdiendo poder adquisitivo en los últimos años por estas circunstancias», añade Chavero, y es que según el estudio un 58% señala que desde la pandemia su capacidad económica se ha visto muy mermada.
El precio de los alimentos básicos y el notable incremento de la vivienda, tanto a causa del euribor en las hipotecas como en el alquiler en Valencia ciudad son las principales causas de este ahogamiento económico de las familias numerosas. Un 37% dedica un tercio de sus ingresos a pagar la vivienda de su sueldo, incluso una de cada cinco familias tiene que destinar hasta un 40% a este apartado. Y aunque sean muchos en casa, tampoco pueden permitirse una vivienda grande. El 42% viven en pisos de entre 80 y 100 metros cuadrados, superficie muy reducida para familias de cinco o más miembros.
En cuanto a la alimentación, se gastan entre un 30 y un 40% de su salario mensual. «Pero hay que pagar más cosas, como la luz, gas, agua, al final tenemos que recortar en consumo energético y en las compras se reducen mucho los productos frescos, nos vemos obligados a prescindir de alimentos más saludables por su alto precio, es una lástima», destaca Chavero.
Precisamente una medida de ayuda contra el gasto energético es el bono social térmico. El 74% de las familias numerosas se beneficia de ello. «Hacemos un gasto energético muy elevado porque consumimos más al ser muchos en casa. Si nos penalizan a partir de un número de vatios consumidos no nos parece razonable ni equitativo, así que el bono debe mantenerse porque nos ayuda mucho, aunque hay que hacer muchos trámites cada año para renovarlo», dice la representante de la asociación, que ha presentado este estudio.
Más de la mitad de las familias numerosas han tenido que reducir su gasto de calefacción y aire acondicionado y un 67% enciende menos la luz. En cuanto a los supermercados el 66% admite que compra las ofertas que están próximas a caducar por su rebaja de precio y han tenido que modificar sus hábitos alimentarios condicionados por la situación económica. «Las familias numerosas somos expertas en ajuste y ahorro, pero hacemos un llamamiento para que las instituciones nos valoren y ayuden. Por ejemplo, la gratuidad del transporte público es una gran ayuda, debería mantenerse para menores», apunta Chavero.
Y en otras partidas menos necesarias, como puede ser el ocio, el ahorro ha sido aún mayor. Siete de cada diez familias han recortado su número de viajes, o incluso han dejado de hacer viajes familiares y un 60% apenas hace ya actividades como ir al cine por el gasto que supone. En cuanto a la educación de los hijos «la elección del centro va determinada por el bolsillo y no debería ser así», dice Chavero. Un 53% lleva a los niños a escuelas públicas y un 43% a concertadas, mientras que sólo el 4% puede permitirse centros privados.
Además, está creciendo el número de familias que se denominan reconstituidas. Es decir, parejas que se unen con hijos de matrimonios anteriores. Con el incremento de los divorcios y separaciones en los últimos años, cada vez son más las nuevas familias que surgen en la Comunitat, muchas en régimen de custodia compartida de los niños con el otro progenitor.
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