Clarisa, la propietaria de Mona (con ella) y Mini, junto a Miguel, el cuidador de sus dos perritas Cavalier King Charles. Damián Torres

«Cuidan a los perros como tú, o mejor, les dan calor de hogar»

Miles de personas usan plataformas que ponen en contacto a dueños y cuidadores. Clarisa es una de ellas. En Gudog encontró a Miguel, que ya es como de la familia

Domingo, 11 de agosto 2024, 01:28

Mini y Mona, las dos perritas de 10 y 9 años de la raza Cavalier King Charles de Clarisa Leyva, mueven su cola alegres. Por la puerta de La Chata Ultramarinos, el negocio que regenta en pleno barrio de Ruzafa de Valencia, ha entrado Miguel Pérez. «Piensan que se van a pasear», dice. Esta vez no, pero Miguel y su mujer han cuidado de estos dos 'peluches' caninos desde que eran cachorros. No de manera continua, pero bastante asidua, ya que Clarisa y su pareja suelen viajar a menudo y, a parte, sus obligaciones laborales y familiares no les dejan tiempo suficiente «para cuidar de ellas». «Mínimo diez o quince veces el último año» calcula Clarisa que ha podido recurrir a los cuidados caninos de Miguel, a quien conoció a través de la aplicación Gudog, una plataforma que pone en contacto a propietarios de perros con cuidadores de confianza.

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En Gudog tienen más de un millón de usuarios, de los cuales la mitad pertenecen a España, y cuentan con más de 10.000 cuidadores, la mitad en España. Tanto esta plataforma como en Préstame tu perrito (trabajan con voluntarios) han notado la evolución al alza de la demanda. «Hemos observado un notable incremento en las peticiones y consultas tanto este verano como desde la entrada en vigor de la Ley de Bienestar Animal. Esta nueva normativa ha sensibilizado a más propietarios sobre la importancia del cuidado adecuado de sus mascotas, aumentando así el uso de nuestra plataforma ahora que llega el verano», señala Andrea Milà, portavoz en España de Préstame tu perrito.

Clarisa dejará con Miguel a sus dos perritas en agosto, cuando tiene reservado un viaje. Él está tan solicitado que, antes de coger vacaciones, los potenciales clientes le consultan disponibilidad. Ahora está cuidando a un perro de raza Golden, pero ya apenas le quedan días disponibles en verano. Y es que, con Miguel y su mujer, los perros están de vacaciones: combinan los paseos por la ciudad (3 o 4 al día) con estancias en Xàbia, entre el mar y la montaña, donde tienen su segunda residencia. Y, por encima de ello, el cariño y el cuidado que les dan a las mascotas, a las que quieren como si fueran suyas. «A Mini se le cayeron los dientes con él, y la enseñaron a hacer pipí», recuerda Clarisa, que dejó a su cachorrita de apenas cinco meses con Miguel ante un viaje programado que no podía eludir. De ahí que la confianza y la tranquilidad en el buen hacer de estos cuidadores. De hecho, lo que más le gustó a Clarisa de esta plataforma es el «calor de hogar» que ofrecen los cuidadores a las mascotas, así como la atención personalizada. Miguel, que se apuntó como cuidador en octubre de 2004, aporta, además de su experiencia con perros –él mismo ha tenido varios, ahora mismo una perrita llamada Pipa, una Cavalier King Charles Spaniel–, una formación como cuidador profesional.

Clarisa no puede estar más agradecida a Miguel. Han pasado por mucho. Mini y Mona tienen bastantes achaques de salud, pero sobre todo a Mona le ha pasado de todo, hasta una intoxicación alimentaria que gracias al seguro veterinario de la plataforma y la rápida actuación de los cuidadores se solucionó sin mayores consecuencias. «Las cuidan como tú, o mejor, viven por y para ellas», señala Clarisa, que bromea diciendo que, al principio, las perritas se volvían tan locas de alegría cuando le veían que temía «que no iban a querer volver» a casa.

El sentimiento es recíproco en el caso de Miguel, que confiesa que «todo lo que le ha traído apuntarse como cuidador ha sido bueno». Se siente afortunado porque puede dedicarse a lo que le gusta, cuidar perros. A modo de ejemplo, la guardería de día cuesta 18 euros, los paseos de 1 hora, 12 euros, y la estancia nocturna, 22. «No es por dinero, disfruto viéndolos bien».

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