La espectacular evacuación de una urbanización de Torrent: policías con cuerdas en medio de la riada

La tragedia que ha sufrido Valencia ha dado la ocasión de conocer la actuación de auténticos héroes. Agentes de la Policía Nacional lograron salvar el pasado martes a 60 personas de la urbanización El Pantano de Torrent que había quedado atrapados y aislados.

Los agentes tuvieron que actuar con gran celeridad ante el empuje de las aguas y la altura que alcanzaron (rondando los cuatro metros). Fue el pasado martes 29 de octubre, un día que pasará a la historia negra de la Comunitat Valenciana, cuando la sala de control envió a los miembros del cuerpo a la urbanización una vez que se había desbordado el barranco.

A los pocos minutos de llegar la situación se tornó crítica por la fuerte crecida del agua que provocó la inundación de la primera línea de viviendas. Fue el momento de arriesgar la vida y en el que los efectivos policiales no lo dudaron. De esta forma, los agentes Juan Manuel y Carlos atravesaron la riada para rescatar a las personas que todavía se encontraban atrapadas en su vivienda. Para ello crearon una línea con una cuerda asegurada por el resto de efectivos policiales.

Tras esta acción, consiguieron rescatar a otra familia de la vivienda contigua pese a que el caudal del río se tornaba cada vez más peligroso con la crecida. La operación también fue coronada por el éxito.

Pero el peligro no había pasado. La riada había ido creciendo y no pudieron abandonar la zona inundada y quedaron atrapados. Cuando el caudal del agua comenzó a reducirse, los agentes procedieron a comprobar si había más víctimas en la zona. Así, oyeron gritos de auxilio desde una vivienda que había quedado semiderruida tras caer dos árboles sobre ella. Allí vieron que había tres hombres en situación crítica que pudieron ser rescatados a través de un agujero que había provocado uno de los árboles.

Posteriormente fueron informados de que en la última casa de ese camino residían dos mujeres de avanzada edad. Allí se fueron los agentes para comprobar su estado de salud. La vivienda estaba parcialmente derruida pero consiguieron acceder al interior. En ella se encontraban dos mujeres, una de ellas de 99 años de edad y totalmente entumecida por el frío, con el agua hasta las rodillas. Esta tuvo que ser sacada en volandas por los efectivos policiales.

Tras quince horas de servicio, y una vez bajó el nivel de las aguas, los agentes abandonaron la zona inundada tras conseguir salvar la vida de un buen puñado de personas.

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