Leandro Benito Antoni, exalcalde del Ayuntamiento de Canet y actualmente concejal del Partido Popular en el municipio, ha sido condenado al pago de una multa y a dos años de inhabilitación para ejercer cualquier cargo público por un delito de prevaricación.
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La sentencia da por probado que el primer edil prevaricó al colocar a su prima hermana en el Consistorio en una plaza de técnico de gestión. El responsable justificó el nombramiento en que su familiar había superado los dos primeros ejercicios de la oposición -lo que le llevaría a estar en la bolsa de trabajo- así como que desarrollaba esa tarea de manera interina desde hacía tiempo.
Todo esto lo hizo a través de un decreto que firma el alcalde sin otra documentación ni proceso de selección que permitiera cumplir todos los requisitos de un proceso público y objetivo, con la igualdad de oportunidades para cualquier aspirante, reprocha el juez.
El que fuera alcalde defendió su inocencia y atribuyó a motivos políticos el hecho de verse envuelto en este procedimiento. El juzgado de lo Penal número 6 de Valencia, en cambio, absuelve a Sancho Sempere, el exsecretario del Ayuntamiento de Canet y cabecilla de la denominada trama de las asesorías, de este delito.
El fallo considera que Sempere, representado por el despacho de Gómez Tejedor, no ha quedado acreditado que participara en la redacción del decreto por el que se asigna el puesto a la prima del alcalde ni que participara de algún modo en el proceso.
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