El examen de Inglés de selectividad también se corregirá a favor de los alumnos

En el caso de la prueba de lengua inglesa, los estudiantes se enfrentaban a diez ejercicios derivados de dos textos (A y B) teniendo que elegir cinco: cuatro basados en aspectos de comprensión y léxico y uno centrado en la producción escrita.

El revuelo generado estuvo motivado por un error en la expresión de dos de las tres opciones de elección múltiple de la cuestión A4.1, pregunta que se calificaba con 0,5 puntos sobre 10. El texto versaba sobre la influencia de las redes sociales y la figura de los influencers, incluyéndose en el primer párrafo la siguiente idea, lógicamente trasladada en inglés: «Las publicaciones e interacciones frecuentes ayudan a que los influencers sean más fáciles de identificar para los fans, y dan a los seguidores una sensación de familiaridad. Muchos influencers también logran establecerse como expertos o autoridades en sus temas incluso sin la acreditación de investigadores».

El ejercicio obligaba a responder al aspirante planteando el siguiente enunciado: «la interacción frecuente en línea…», y cada estudiante que hubiese elegido la modalidad A de la prueba debía escoger entre las opciones: a) ayuda a los influencers a conocer a sus seguidores; b) ayuda a los influencers a identificar a sus fans; o c) es útil para que los influencers sean apoyados por expertos.

En realidad ninguna de las opciones ofrecidas para que el alumnado respondiera era correcta, ya que, en base al texto, quienes «identifican» o «conocen» son los seguidores a sus influencers, y no al revés. Lo lógico es que las respuestas a) o b), ambas opciones de la discordia, se hubieran expresado de esta manera: ayuda a los seguidores a conocer o identificar a los influencers. No obstante, cabe apuntar que la opción c) era bastante más descartable, al carecer de sentido lógico para responder a la cuestión preguntada.

Fuentes de Educación explicaron a este diario que habían recibido dos quejas formales en relación al citado examen de Inglés. Así pues, también informaron de que los especialistas de la materia se encontraban estudiando la cuestión para pasar la decisión adoptada a la comisión gestora y dar una respuesta oficial a la problemática. Por otro lado, según fuentes consultadas por LAS PROVINCIAS, el error con los términos fue comentado en las reuniones en las que participan los docentes encargados de las correcciones, llegándose a plantear el dar las tres respuestas como válidas tras acreditarse la incongruencia de las opciones planteadas en relación al texto inicial. No obstante, el veredicto final ha sido dar por válidas las opciones a) y b) no corriendo la misma suerta la opción c) por lo que aquellos alumnos que la seleccionan como opción de respuesta, la tendrán contabilizada como incorrecta.

Sobre la prueba de Matemáticas II, la comisión gestora de la EBAU en la Comunitat concluyó en otorgar un criterio de corrección favorable al estudiantado dado que los aspirantes debían elegir cuatro de los ocho problemas presentados y el número cuatro incluía un fallo en el enunciado que desconcertó a los alumnos una vez empezaron a abordarlo. En base a la información proporcionada en la pregunta, se trataría de un cuadrado cuando su verdadera forma sería la de un rectángulo.

La comisión de Matemáticas II, formada por especialistas de las cinco universidades públicas y que se encarga del diseño de los exámenes,reconoció el pasado jueves la inexactitud del planteamiento, por lo que se ha pedido a los correctores que se realice una valoración de las respuestas que sea favorable a los estudiantes. Desde Educación explicaron que se había recibido una queja formal por parte de un centro.