b. f.
Valenica
Domingo, 30 de septiembre 2018, 09:07
El escritor Vicente Blasco Ibáñez defendió su independencia hasta el final de sus días. Lo mismo ha sucedido con su nieto, Vicente Blasco Ibáñez Tortosa, fallecido el pasado lunes a los 86 años, tras una vida dedicado a la abogacía y, durante los años de la Transición y la década de los 80, a la política como concejal, diputado provincial y autonómico como representantes de los votanes de Unión Valenciana. Nació el 27 de enero de 1932 en Valencia. Durante la Guerra Civil tuvo que exiliarse en Francia junto a sus padres y con la segunda mujer de Blasco-Ibáñez. Regresó tras el final de la contienda, si bien su padre permaneció en Francia hasta 1977. La familia perdió los derechos sobre la cabecera del diario Pueblo, fundado por su abuelo. Estudió Derecho en Valencia y Granada. Ejerció su actividad como letrado y durante unos años fue abogado de la empresa Aumar. En 1966 fundo junto a su madre, Pilar Tortosa, la editorial Prometeo, con el fin de recuperar la obra literario de su abuelo. En 1979 ocupó un puesto de concejal por Unión Regional Valenciana. Posteriormente, en 1987, fue diputado en Les Corts de la mano de Vicent González Lizondo, líder de Unión Valenciana. Abandonó la política en 1991. Años más tarde, expresó su discrepancias con las políticas del PP, haciendo gala de ese espíritu indendiente propio de la estirpe del gran escritor valenciano.
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