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El presidente de la Federación de Caza de la Comunitat, Raúl Esteban, reclamó ayer en el Consejo autonómico de caz que «se faciliten las acciones como la realización de ganchos y batidas y se apruebe un plan integral de fomento del sector, solicitando subvenciones directas al mantenimiento de perros de caza y organización de acciones colectivas de caza mayor, dado el incremento del esfuerzo que debe hacerse para el control poblacional y la exigencia de la conselleria para que se cace a destajo, con la ampliación de los periodos hábiles«.
Esteban recordó que «cazadores y clubes están realizando un sobreesfuerzo e invirtiendo cada vez más recursos para hacer frente a esta problemática». Y es que la actividad está regulada por un plan técnico de ordenación cinegética, por lo que se convierte en un instrumento de gestión. «Es un trabajo cuyos costes soportan sólo los propios cazadores y los clubes, al contrario que ocurre con otros colectivos que disponen desubvenciones públicas a su disposición; y lo cierto es que de ello se beneficia toda lasociedad pues se evitan daños a la agricultura y las infraestructuras, innumerables accidentes de tráfico, y también la transmisión de epizootias y zoonosis», destacó Esteban.
Por otro lado, sobre las modificaciones previstas en la Ley de Caza, desde la Federación de Caza se propuso la inclusión del dogo argentino en las rehalas para caza mayor y ha solicitado la sanción por entorpecer cacerías, así como la reducción de los períodos de inhabilitación para ciertas infracciones graves.
Esteban también planteó que el uso de otros métodos alternativos a la caza «no es la solución al problema». Y es que «la caza, además de ser la mayor fuente de riqueza para el mundo rural, es la herramienta más eficaz para el control poblacional, y la más económica». En este sentido, el presidente de la Federación de Caza reconoció que «entendemos su utilización cuando no haya otra solución más satisfactoria y en algunas zonas de seguridad donde sea imposible practicar la caza. O en casos puntuales muy justificados, y cumpliendo siempre con la normativa como el resto de jaulas trampa y personas que las manejan y autorizaciones administrativas».
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