La Fiscalía no ve delito en la irregularidades con el cribado del cáncer y Sanidad se centra en resolver los retrasos

La Fiscalía Provincial de Valencia ha tardado muy poco en abrir y cerrar la investigación sobre las irregularidades del gobierno del Botánico con los retrasos del cribado del cáncer de mama. Este martes se han archivado las diligencias de la investigación preprocesal que el lunes abrió a raíz de la denuncia presentada por la Asociación Defensor del Paciente sobre posibles irregularidades en estos programas de detección precoz, al no apreciar indicio alguno de delito en los hechos comunicados. Esta decisión es irrecurrible.

El ministerio público, en un decreto del pasado 4 de marzo, acordó iniciar esta investigación para determinar una eventual tipicidad de los hechos, aunque ya descartaba la existencia de delito, según consta en el texto. Sin embargo, en un decreto de tres días más tarde, el fiscal jefe archiva las diligencias al entender que la denuncia «no contiene ningún supuesto susceptible de ser calificado penalmente, ni informa acerca de indicio alguno de esta naturaleza que justifique» la intervención del ministerio fiscal.

El conseller de Sanidad, Marciano Gómez, ha destacado que no van a poner «el foco» en temas judiciales, sino que quieren acabar con el problema de salud. «Hay que ser muy prudente, lo que se trata es de resolver el problema de las mujeres valencianas que no se les está llamando para el cribado del cáncer de mama, resolver ese problema de salud. Queremos tener toda la información, hay varias lagunas de opacidad que se van desgranando. Yo no iba a denunciar porque mi objetivo era mejorar el estado de salud. Queremos incidir en mejorar el estado de salud de los ciudadanos de la Comunitat», ha indicado esta martes.

Sanidad informó el pasado mes de febrero de la apertura de una investigación por posibles irregularidades en los programas de cribado de cáncer de mama, de colon y de cérvix en los años del gobierno del Botánico. Así, apuntó que había detectado posibles retrasos de hasta cuatro años en la primera citación a entre 150.000 y 200.000 mujeres, así como demoras de dos años para realizar las mamografías de seguimiento. Pero con las investigaciones que la conselleria mantiene en marcha, Gómez ha dicho que estas cifras de mujeres afectadas «son variables, en un sentido o en otro», por lo que abre la puerta a que puedan ser más.

«Vamos a tener prudencia y no perder el foco, y el foco son las mujeres, cómo puedo arreglar y mejorar el estado de salud y si algo no funciona, cambiarlo. Mi foco no es denunciar. Si viéramos algo susceptible de ser delictivo, lo denunciaríamos, pero hasta el momento no lo hemos visto», ha apuntado el conseller. El Defensor del Paciente puso en conocimiento estos hechos ante la Fiscalía para depurar posibles responsabilidades ya que consideraba que estos retrasos comportan «una situación de agravamiento irreversible si se detectara un cáncer». Por ello, pedía investigar «la veracidad de estos datos por el riesgo para la salud o vida de las mujeres y la dejación de funciones de quienes no hayan tomado las medidas de precaución».

Al respecto, la fiscal designada para conocer las diligencias de investigación señala que el hecho «nuclear» de esta denuncia es el retraso en la realización de un número «muy elevado» de mamografías, pero «como dato sujeto a investigación interna y pendiente de confirmar y concretar en sus causas y efectos». Por ello, señala que corresponde a los órganos administrativos competentes evaluar el origen y resultados del mencionado retraso y no al ministero fiscal «mientras en su haber no consten indicios, por pequeños que sea, de la comisión de un delito».

Al respecto, la presidenta de la Asociación Defensor del Paciente, Carmen Flores, afirma no entender este archivo un día después de haberle trasladado la apertura de diligencias pre-procesales con asignación de un Fiscal. Así justifica su denuncia en que fue el actual Consell el que informó de esta situación y cuestiona que no se pida entonces «nada» al Gobierno valenciano para «conocer en qué se ha basado para hacer esta 'denuncia pública'». Del mismo modo, pone en entredicho «si no es un delito poner en riesgo a las personas que, por falta de prevención, se pueden incluso morir».

En los trabajos de ir solucionando este retraso de 200.000 mujeres en las pruebas, el responsable de Sanidad ha apuntado que han puesto «a leer las pruebas en las unidades de prevención de cáncer de mama y en los hospitales. Estamos concertando con la privada para quitar este problema estructural y meter nuevas tecnologías, Inteligencia Artificial y resolver el problema tal y como se merecen las 425.000 mujeres que hay entre 45 y 70 años en la Comunitat para poder hacerles el cribado como toca cada dos años», ha señalado.

«No me planteo denunciar.  Estamos poniendo todos los medios para intentar resolver no sólo que entren al programa, sino que puedan hacerse pruebas cada dos años. Lo primero que hacemos es todas aquellas mujeres que tenían la mamografía hecha, hacer la lectura para detectar si es normal o si hay alguna patología y en eso estamos incidiendo. Me planteo que nadie con una lesión esté sin leerse», ha determinado Marciano Gómez.

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