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El acuerdo no se ha hecho esperar. La reunión que comité de empresa y dirección de Ford Almussafes han mantenido este miércoles por la tarde ha concluido como se esperaba. La empresa presentará a la Administración una propuesta para acogerse a un ERTE por fuerza mayor que tendrá vigencia desde el 29 de octubre y se extenderá hasta el 30 de noviembre.
Los sindicatos han dado el visto bueno a la medida que la dirección de la compañía presentó el martes por la tarde, después de acordar que la multinacional complementará el 100% de los conceptos salariales de sus trabajadores mientras el ERTE esté en vigor. No obstante, la medida presentada a raíz de la DANA puede desactivarse en cualquier momento si la situación mejora.
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Cabe recordar que las medidas aprobadas por el Consejo de Ministros dentro del 'Plan de respuesta inmediata, reconstrucción y relanzamiento de la Comunitat Valenciana' eximen a las empresas que recurran a un ERTE por fuerza mayor del pago de las cotizaciones a la Seguridad Social de la plantilla.
El ERTE por fuerza mayor sustituirá durante el mes de noviembre al ERTE que la planta valenciana ya tenía en vigor, pactado hasta el 31 de diciembre de este año. A partir de ahí, el comité de empresa deberá negociar el nuevo mecanismo, que deberá entrar en funcionamiento a partir del 1 de enero de 2025 para tratar de proteger el empleo en la fábrica valenciana durante los dos próximos años, mientras se espera a la llegada del nuevo vehículo híbrido que la compañía pretende fabricar en Valencia.
Por ahora, el Ford Kuga es el único modelo que se produce en Almussafes. Al menos hasta que llegó la DANA y arrasó con todo. Durante la semana, dirección y sindicatos volverán a sentarse para acordar cuando se retoma la actividad en la factoría, que, según UGT-Ford, será la próxima semana «con toda probabilidad». El estado de las carreteras o la situación de los proveedores son los aspectos que determinarán cuando pueden volver a ponerse en marcha las líneas de producción de la planta de la Ribera.
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Patricia Cabezuelo
Algunas de las empresas que dotan a Almussafes de las piezas necesarias para la fabricación del Kuga han sido arrasadas por el temporal. Es el caso de Industrias Alegre, que es uno de los principales proveedores de la multinacional norteamericana. La compañía valenciana con centro productivo en Albal sufrió graves daños a causa de la DANA, por lo que Ford deberá buscar alternativas para seguir con la producción de su único vehículo en planta. O esperar a que su proveedor se recupere. En ese sentido, Enrique Careaga, CEO de Industrias Alegre, aseguró que se van a necesitar ayudas «suficientes y rápidas» para retomar la actividad de su compañía, de la que depende parte del tejido productivo del sector automotriz de la región.
Por tanto, el regreso al trabajo de la plantilla de Ford Almussafes es todavía una incógnita. Pese a ello, desde UGT-Ford esperan que la planta de motores retome la actividad el próximo lunes y la de vehículos haga lo propio antes del miércoles. De ello también dependerá la situación particular de cada trabajador de la firma. «La vuelta va a ser más que complicada. Es imposible que todo el mundo pueda volver. Tenemos muchas compañeras más fuertemente impactadas por la DANA», ha asegurado Carlos Faubel, secretario general del sindicato mayoritario en la factoría.
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