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La provincia de Valencia no tenía el mejor sistema de alertas para hacer frente a una DANA como la que arrasó con parte de la ... provincia el pasado 29 de octubre. La Confederación Hidrográfica del Júcar ha adjudicado este miércoles a las 14.13 de la tarde un Sistema de Alerta Temprana (SAT) para prevenir nuevas avenidas en los ríos y en los barrancos de la cuenca de parte de la provincia de Valencia. Un sistema de alerta que sí que está aplicado en otras áreas, como la del Ebro, entre otras, y que se va a instalar en el terreno afectado tras una DANA que de momento ha dejado 220 muertos y ocho desaparecidos. La adjudicación, por más de 22 millones de euros, se ha aprobado poco después de la comparecencia de la ministra de Medio Ambiente, Teresa Ribera, en el Congreso, y antes de la que ha tenido lugar en el Senado, donde ha adelantado la medida.
El SAT es un sistema de alerta del que no disponía la Confederación Hidrográfica del Júcar y que podría haber sido muy útil el martes 29 de octubre. «Estos sistemas se centran en el análisis en tiempo real de los datos disponibles e incorporar previsiones futuras de lluvias, para obtener mediante modelación hidrológica una estimación de los futuros caudales circulantes», señala la adjudicación. Una explicación que viene a decir que con este sistema, que no disponía el área del Júcar, se podría haber tenido un previsión de la avenida de agua sobre el barranco del Poyo y, casi con toda seguridad, haber alertado a la población de la tromba de agua que se avecinaba.
«Asimismo, estos caudales determinarán la explotación de los embalses existentes, de acuerdo con sus normas de explotación, lo que permite realizar una previsión de los caudales que circularán por los cauces. Esta anticipación de la situación, permitirá adelantar la generación de alertas ante eventos climáticos extremos ayudando a disminuir el tiempo de reacción para la gestión más eficaz y reducir los riesgos en la población», señala el documento oficial adjudicado por la CHJ. Una explicación que no tuvo su reflejo en la gestión de la crisis el 29 de octubre, ya que el tiempo de reacción no fue eficaz para evitar la tragedia en l'Horta Sud tras las lluvias caídas aguas arriba en el barranco del Poyo. Desde la catástrofe, las administraciones han buscado culpables en lugar de trabajar juntos para mejorar un sistema que se erigió como fallido e ineficaz para evitar, por los menos, tantos muertos.
«La experiencia adquirida en la gestión del presente episodio ha mostrado la necesidad de incorporar con urgencia un SAT al SAIH de la Confederación Hidrográfica del Júcar, para anticipar el tiempo de respuesta de las cuencas hidrográficas y reducir el tiempo de aviso a las autoridades competentes en protección civil. En este sentido, la implantación urgente de un primer SAT, que será completado posteriormente mediante un contrato ordinario, permite a corto plazo mejorar de forma apreciable la capacidad de realizar avisos y por tanto mejorar la gestión del riesgo de inundación», señala la resolución para la declaración de emergencia para mejorar los sistemas de alerta a la población a la que afecta la cuenca del Júcar y del Túria.
El SAT, que se aplicaría en una primera versión, se instalará para mejorar la capacidad predictiva ante situaciones de avenida e inundaciones y reduzca el efecto de las inundaciones con estos objetivos:
-Utilizar de forma intensa la importante información meteorológica existente en tiempo real, especialmente la procedente de AEMET
-Mejorar el conocimiento sobre el comportamiento hidrológico de los principales ríos y barrancos
-Hacer previsiones, a corto plazo, sobre la evolución de caudales en las principales cuencas hidrográficas.
-Optimizar la operación de los embalses, mejorando su efecto de laminación de las crecidas.
El contrato, que llega a más de 22 millones de euros con el IVA y que ha sido adjudicado a la empresa Senda. Desarrollo de Infraestructuras y Medio Ambiente, servirá también para reparar todos los pasos de caudal del SAIH que quedaron inutilizados o arrasados por la DANA, tanto en la rambla del Poyo como en el Magro y el Túria.
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