Imputan a las dos últimas doctoras que atendieron al niño de Petrer que falleció tras acudir cinco veces a Urgencias

La titular del juzgado número 3 de Elda ha citado a declarar el 12 de diciembre como investigados a dos de los médicos que atendieron a Aitor, el niño de ocho años de Petrer que falleció de peritonitis tras acudir hasta en cinco ocasiones a Urgencias. La juez quiere dilucidar si existió mala praxis en el ejercicio de sus funciones ya que son las dos últimas doctoras que vieron al menor antes de que falleciese el 28 de octubre de 2020 por una peritonitis.

Esta imputación llega a raíz del informe pericial solicitado por el juzgado y realizado por una especialista de cirugía pediátrica digestiva en el que se apunta que pudo haber mala praxis por parte de la doctora de Urgencias del Hospital de Elda y por la profesional del centro de salud.

En el caso de la médico del hospital, el informe refleja que pudo haber una falta de atención al no realizar al paciente ninguna prueba diagnóstica ni solicitar el apoyo de otro compañero para la observación del niño que llegaba con fuertes dolores abdominales desde unos días antes.

Tras pasar por el hospital, la abuela del menor, que ejercía como madre al tener la patria potestad, acudió al servicio de Urgencias del centro de salud de Petrer donde le atendió otra doctora que en este caso le administró un medicamento, que según el informe de la perito no está recomendado para niños y que pudo acelerar las patologías que le provocaron la muerte. Además, en el informe pericial también se subraya que pese a la insistencia de la madre porque le realizaron una ecografía al menor, la médico decidió no derivarle al hospital y lo mandó a casa.

La autopsió realizada el menor reveló que la causa de su muerte fue una peritonitis provocada por la rotura del apéndice unos días antes que fue provocándole graves daños en diferentes órganos.

La familia de Aitor había reclamado desde el inicio del proceso judicial que se investigara a los médicos que lo atendieron durante su periplo por los servicios de Urgencias. Sin embargo, en el primer informe del médico forense del juzgado de Elda se consideró que no habían incurrido en mala praxis aunque manifestó que era recomendable la pericial por parte de un especialista digestivo.

Después de que varios profesionales en cirugía pediátrica digestiva rechazaran realizar este informe, la juez insistió en que se debía realizar para tener todos los datos para juzgar el caso. Las médicos investigadas, en caso de que finalmente se considere que hubo mala praxis, pueden enfrentarse a la inhabilitación e incluso a penas de prisión ya que por parte de la defensa se plantean acusarlas de un delito de homicidio.

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