Indignación por el cierre de centros de salud: «Me parece fatal. La sanidad es un servicio esencial»

Durante la mañana de este miércoles estos puntos de urgencias no están registrando saturación, aunque sí una destacada afluencia de personas que tenían cita programada en su centro de salud y acuden al PAS para ver si les pueden hacer el análisis o la prueba para la que estaban citados. Pero todos se encuentran una respuesta negativa, ya que este miércoles los centros no realizan esos trabajos y sólo atienden urgencias, como si fuera un domingo. Lo que está provocando indignación entre muchos pacientes e incluso, como ya ocurrió el martes por la tarde, algunas reclamaciones por escrito como protesta.

Así pues, el problema se va a trasladar a los próximos días, porque todas las citas que había programadas para este miércoles, tanto en los centros de salud como en los de especialidades o en los hospitales, van a tener que ser aplazadas a otros días. Teniendo en cuenta que apenas hay huecos disponibles o directamente no hay, eso supondrá la saturación del sistema, más demoras para los pacientes y Sanidad deberá buscar fórmulas, como habilitar módulos de horas extras para asumir esta demanda puntual.

El Punto de Atención Sanitaria de Campanar es uno de los cuatro que están funcionando en Valencia ciudad. Allí ha tenido que ir Ramón. «Tenía cita esta mañana para una cura. He ido al centro de salud para ver si al menos atendían curas pero efectivamente estaba cerrado», señala. «Estamos todos asustados con lo que pasó en la dana, viene todo a consecuencia de eso. Pero ahora esta decisión es exagerada, aquí ha llovido mucho más otras veces y no han cerrado nunca los centros. Lo pagamos los pacientes», critica el hombre. «Había gente citada para análisis y otras pruebas, han estado en ayunas y no se lo han hecho, y ahora tendrán que volver, pedir otra vez hora y veremos», apunta.

María es otra paciente que también ha tenido que ir a este PAS y se mostraba indignada. «Me parece fatal que hayan cerrado, no sé si rozará la ilegalidad porque la sanidad es un servicio esencial y no entiendo que cierren y dejen tan pocos sitios abiertos, que se van a colapsar. Lo paga el paciente, que no puede ir a su centro cuando está enfermo», lamenta la mujer. «Tenía cita esta mañana en mi centro de salud porque me encuentro mal y he tenido que venir aquí. Con esto en concreto se ha exagerado, porque además va a repercutir en los próximos días, porque todas las citas que había programadas hoy en sanidad las van a tener que poner otros días, cuando hay gente que lleva meses esperando una cita, no sé dónde las van a poner ahora, qué huecos les van a buscar», indica.

Sanidad informaba este martes de forma precipitada de que se cancelaban y suspendían todas las citas, salvo oncológicas y cirugías con ingreso y serían reprogramadas en las provincias de Valencia y Castellón, así como los departamentos de salud de Dénia y Alcoy. Un mensaje que se empezó a difundir en torno a las 15:30 horas pero que a muchos valencianos les llegaba a las 20 horas, debido que el sistema estaba colapsado y tanto la web como la aplicación de Sanidad daba fallos durante toda la tarde. También este miércoles el mensaje llegó a diferentes horarios a los ciudadanos. Hubo quien lo recibió a las 13 horas y muchos otros entre las 16 y las 17 horas. Y la web y la aplicación continúan dando problemas.

También le afectado este cierre puntual a Andrea. «No veo nada justificado que cierren los centros de salud, sobre todo si las personas están siguiendo algún tratamiento o tienen que darles alguna medicación o un análisis. Es perjudicial para los pacientes, es una medida demasiado estricta que quita servicios básicos», expresa la joven.

Por el momento la situación no arroja ningún colapso en los Puntos de Atención que están funcionando este miércoles, ni tampoco en los hospitales. Las únicas situaciones de saturación y picos de trabajo se producen por las decenas de llamadas que están registrando los centros de pacientes que tenían citas programadas y quieren saber lo que tienen que hacer, lo que provoca que los administrativos no paren de atender los teléfonos. Pero presencialmente no se registran colas.