Los insólitos objetos que los valencianos pierden en el metro

Ferrocarrils de la Generalitat (FGV) facilitó 76 millones de desplazamientos en 2022 mediante la red de metros y tranvías de las áreas metropolitanas de Valencia (Metrovalencia) y Alicante (TRAM). Con semejante volumen de actividad es normal que se produzcan olvidos en los vehículos, cuando no extravíos que duelen en el alma por su importancia, valor económico o sentimental. Las carteras, los DNIs y las gafas de sol son los objetos más habituales que el personal se encuentra en los asientos -o que son depositados en las estaciones por personas que además de usuarias son buena gente-, aunque se han registrado casos realmente llamativos por lo inverosímil de la pérdida.

Según se desprende del último balance realizado por la empresa pública durante el año pasado se recogieron 11.344 objetos perdidos: 9.047 en las unidades y paradas de Metrovalencia y 2.297 en las del TRAM. Expresado de otra manera, el promedio es de 31 artículos al día y de casi un millar al mes.

En cuanto a los protocolos, ambas redes trabajan de la misma manera. Lo habitual es que cualquier objeto extraviado sea depositado por otros viajeros en la parada en la que baje, donde permanecerá 30 días. Transcurrido ese periodo se trasladará a una estación de referencia (Valencia Sud y Luceros, respectivamente) donde por regla general estará otro mes. El siguiente paso, si nadie lo ha reclamado o el dueño no ha sido localizado, es que sea custodiado en las respectivas oficinas de objetos perdidos de la Policía Local de Valencia o de Alicante. Aunque algunos no llegan a esta fase, pues su tratamiento es especial, como sucede con el dinero en efectivo.

Según los datos facilitados por FGV, los objetos que destacan (por este orden y en base a las unidades encontradas) en la red de Metrovalencia son DNIs, carteras, llaves, mochilas, carnés diversos (pasaportes, permisos de conducir o tarjetas sanitarias), móviles, gafas y paraguas.

Estos artículos no se hallan de manera homogénea durante el año, pues existen épocas propicias para perder determinados objetos. En diciembre y enero el personal encuentra más tarjetas bancarias por las compras de Navidad; en marzo, por las Fallas, cualquier tipo de objetos; en mayo, con la llegada del buen tiempo, las gafas de sol se dejan ver con más frecuencia en los asientos vacíos; y en octubre, cuando llega el frío y la lluvia, predominan los paraguas, las bufandas y los guantes.

Además de los anteriores también se han encontrado artículos menos frecuentes, cuando no realmente sorprendentes, como bicicletas, muletas, maletas, dosis de insulina, carros de bebé, sombreros, sombrillas, cámaras de fotos, disfraces, uniformes de todo tipo, botas de seguridad, recetas, medicamentos o informes médicos.

También llaman la atención olvidos de décimos de lotería, de denuncias de la Guardia de Civil y del juzgado correspondiente, de justificantes de apuestas deportivas o quinielas, de libros electrónicos y de papel, de cascos de motos, de discos de vinilo, de zapatos, de aspiradoras y de bastones de personas invidentes.

Gracias a los protocolos establecidos por FGV, la recuperación por parte del propietario se cifra en un 28,1 % en Metrovalencia -2.549 objetos en 2022- y en un 31,6% en el caso del TRAM. El porcentaje restante es entregado a la Policía Local de Valencia o trasladado a un punto verde o de reciclaje si se trata de objetos en evidente estado de desgaste o deterioro.

En cuanto al tiempo que se tarda en recuperar un artículo, influye (y mucho) si hay algún elemento identificativo o el usuario lo reclama. De hecho cuando se trata de un objeto de valor se suele retirar incluso la misma jornada de su pérdida.

Las estaciones con Espai del Client (Colón, Xàtiva y Alacant), el Centro de Atención del Cliente de Benimaclet y los Punt del Client (Àngel Guimerà, Empalme y Mislata) son los puntos de recogida por parte de los usuarios siempre que el objeto no haya sido trasladado a la sede central de Valencia Sud.

Cuando llegan a este punto los objetos de valor se diferencian para darles un trato especial en la cadena de custodia, incluyendo fotografías y la utilización de cajas fuertes.

En cuanto a los documentos oficiales (DNI, pasaportes, etcétera), son entregados a la policía a la mayor brevedad posible para localizar a los propietarios, mientras que las tarjetas bancarias son destruidas para que no puedan ser manipuladas, evitando riesgos innecesarios.

Respecto al resto de objetos que permitan localizar a sus propietarios se realizan seguimientos y pequeñas investigaciones por parte del personal de Atención al Cliente. Y respecto al dinero en metálico recogido de carteras, bolsos o monederos que no ha sido recuperados por sus dueños FGV lo entrega a entidades benéficas para ayudar a sufragar sus gastos.

Por su parte, los objetos que más aparecen en los trenes y tranvías de Alicante y su área metropolitana son, por orden, carteras y monederos, mochilas, documentación (DNIs, pasaportes, permisos de conducir, tarjetas sanitarias), móviles, llaves, gafas, bolsos, carpetas y paraguas.

En cuanto a artículos menos habituales o insólitos, destacan bicicletas, muletas, bastones, ordenadores portátiles, tablets, maletas, carros de bebé, cascos de moto, neceseres, sombrillas, radiografías, recetas o informes médicos.

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