j. s.
Miércoles, 20 de enero 2021
La vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, publicó el pasado martes un tuit a primeras horas de la noche en el que aseguraba que en la reunión de la comisión interdepartamental celebrada al mediodía se había aprobado restringir las reuniones en los domicilios. La propuesta que los consellers de Compromís llevaron a la reunión pretende limitar las reuniones en los domicilios únicamente a los convivientes para evitar visitas salvo en el caso de personas que necesiten cuidados.
Publicidad
Ese tuit fue la primera noticia que se tuvo sobre la propuesta. En la comparencia posterior a la comisión ni Ximo Puig ni la consellera de Sanidad hicieron la menor referencia a la pretensión de Compromís.
La propuesta se encontró con un jarro de agua fría por parte de la Delegación del Gobierno. En el encuentro tanto desde la Guardia Civil como desde la Policía Nacional se hizo llegar la preocupación de los agentes por el control de estas reuniones porque en el actual marco legal del estado de alarma no se puede irrumpir en un domicilio privado sin orden judicial.
Más sobre el COVID-19
Fuentes de la Delegación del Gobierno explicaron que se trata de una cuestión de difícil encaje legal porque se trata de una posible vulneración de derechos fundamentales «y España no es un estado policial».
Las reticencias de la Delegación del Gobierno se suman al escepticismo que la medida ha provocado en el PSPV. Incluso las versiones que se ofrecían desde uno y otro lado no eran muy coincidentes. Mientras que desde Compromís aseguraban que era una propuesta que se había aprobado en la comisión, desde Presidencia no desmentían la versión pero tampoco certificaban plenamente las tesis de la vicepresidencia.
Publicidad
Fuentes del Palau matizaban que era una cuestión que se puso sobre la mesa sin llegar a concretarse e incluso se entendió como una medida a tomar la próxima semana dependiendo del avance de la pandemia.
Ambas partes sí que coincidían en las dificultades que había para darle un encaje legal ya que afecta a derechos fundamentales y vinculaban la propuesta a una «flexibilización» de las condiciones del estado de alarma que se iba a abordar en la reunión que celebró ayer el consejo interterritorial de Sanidad. De hecho, el Consell iba a pedir que el Gobierno diera mayor margen a las comunidades para actuar.
Publicidad
Noticia Relacionada
En cambio la ampliación del toque de queda -que dependía de la modificación del estado de alarma- el presidente Puig prácticamente la dio por hecha. Desde el Palau insistieron en las dificultades legales para restringir el derecho de reunión lo que podría hacer muy complicada la aplicación de la medida.
La gestión del Covid-19 ha ervido para evidenciar las diferencias entre los socios del Botànic. Desde Compromís y Podemos se han venido exigiendo medidas más duras. En la dos últimas reuniones de la comisión interdeparamntal (el 5 y el 19 de enero) los consellers de estas formaciones han llegado a reclamar el confinamiento total.
Publicidad
La petición ha sido desoída por sus socios socialistas que han llegado a encontrar más respaldo en Partido Popular y Ciudadanos en su estrategia de aplicar solucciones graduales ante el avance de la pandemia.
Desde Compromís se pidió en la comisión del martes el cierre de los centros comerciales. Al ser rechazada propuso que al menos no abrieran los sábados, el día de mayor afluencia, para reducir las aglomeraciones. Tampoco fue escuchada. Un informe de la Policía Autonómica viene a desmontar la tesis de Compromís sobre el riesgo que suponen las superficies comerciales en la propagación de la enfermedad.
Publicidad
El informe policial se refiere a las inspecciones realizadas en distintas áreas comerciales durante los días 15 y 16 de enero. «Se ha observado un estricto cumplimiento de las medidas estipuladas en relación a la alerta sanitaria», concluye el documento que añade que «no se dan aglomeraciones y la asistencia de público a los centros comerciales es baja o limitada».
El escrito prosigue detallando que en todas las inspecciones se puede comprobar que «no sólo no se rebasa el límite del aforo permitido» sino que la tónica habitual durante esos días ha sido que no llegue a alcanzar la mitad de la capacidad permitida a los locales (el 30%). En la provincia de Valencia se inspeccionaron 25 grandes tiendas y estas estaban «a un 30% del aforo» y sin que se produjera ninguna incidencia.
Noticia Patrocinada
Los comerciantes critican el cierre a las 18.00 h: «Abriré antes para poder vender». Así queda el toque de queda definitivo en Valencia. Así se puede hacer deporte con las nuevas restricciones en la Comunitat. Las nuevas medidas contra el Covid en los bingos, casas de apuestas y casinos de Valencia.
Empieza febrero de la mejor forma y suscríbete por menos de 5€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.