Domingo, 24 de febrero 2019, 00:06
Andalucía y Exremadura concentran las principales ganaderías, y desde allí los toros tienen que viajar hasta los distintos pueblos de la Comunitat Valenciana, una labor que se realiza con sumo cuidado. Una semana antes de su exhibición, los ejemplares son transportados en camiones especiales hasta cebaderos próximos a las localidades de destino. Allí descansarán y serán alimentados debidamente hasta el día que saltarán a la calle. Si la estancia va a ser corta, se ubican en toriles separados para evitar que embistan a otros animales. En cambio, si van a estar más tiempo, algunos cebaderos cuentan con cercados para que el animal tenga más espacio.
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