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R. ESCRIHUELA / DELEGACIONES
VALENCIA.
Viernes, 16 de noviembre 2018, 00:49
El temporal que arrancó el miércoles por la noche en la Comunitat continuó con fuerza durante la jornada de ayer. Las lluvias se cebaron con la comarca de la Safor donde los más de 300 litros dejaron a su paso carreteras cortadas, calles inundadas y a 20.000 estudiantes sin clase ante las intensas precipitaciones. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) elevó a rojo el nivel de alerta por precipitaciones de 300 litros por metro cuadrado. La alerta para hoy es naranja con riesgo de precipitaciones de hasta 200 litros en doce horas.
También la lluvia se dejó sentir en algunos puntos de la Comunitat, especialmente en las comarcas de la Ribera y la Marina Alta, aunque con menor virulencia.
Localidades de la Safor como Ador, Ròtova, Palma de Gandia o el distrito de montaña de Marxuquera (Gandia) pasaron la noche del miércoles en vilo tras aguantar una tromba de 200 litros en apenas unas horas que únicamente dejó daños materiales. Los registros ascendieron a lo largo de la jornada a más de 300 litros en un día donde la tormenta eléctrica también fue la protagonista y dejó a oscuras durante un tiempo a varios municipios del sur de la provincia de Valencia. Hasta el mediodía se habían registrado 1.100 rayos en la comarca.
A partir de las 10 de la mañana la lluvia comenzó a caer con fuerza en otros puntos de la Safor y durante más de una hora complicó la circulación en caminos rurales y carreteras comarcales. Las calles de la playa de Gandia y Daimús quedaron anegadas durante varias horas impidiendo el paso de vehículos. La red de alcantarillado no daba abasto. También hubo filtraciones en el centro comercial La Vital, el mercado del Prado y la Central de Policía de Gandia.
Previsión
Las intensas precipitaciones que cayeron en el interior de la Safor fueron las culpables de que miles de cañas y otros restos llegaran hasta el Barranco de Sant Nicolau en el puerto de Gandia. La falta de limpieza de los cauces quedó reflejada en la estampa del Grau donde las cañas se amontonaban junto al recinto portuario y obligó a una rápida actuación para retirarlas y evitar que estas llegaran al mar e invadieran el litoral.
La Autoridad Portuaria de Valencia y la Confederación Hidrográfica del Júcar tuvieron que actuar de urgencia con la colaboración de la Cofradía de Pescadores para levantar una barrera de protección en la zona portuaria.
Donde también estuvieron en alerta fue en Tavernes de la Valldigna. Los más de 150 litros que se recogieron en Simat elevó el caudal del río Vaca que creció de manera considerable a su paso por la capital vallera. Los vecinos de Tavernes residentes en la zona del Bolomor estaban anoche pendientes de la crecida del río Vaca a su paso por la localidad. De hecho, lo tenían todo preparado por si debían abandonar sus casas. No en vano, al cierre de esta edición, la Policía Local temía seriamente que el río se desbordara. Además, numerosos vecinos se afanaban en sacar los coches de los aparcamientos subterráneos ante la posibilidad de que éstos se inundaran. Y es que las grandes cantidades de lluvia registradas en Simat, Benifairó y otras poblaciones del interior elevaron el nivel de agua en el río.
El Ayuntamiento procedió al cierre del Azud para evitar el tráfico de vehículos por una zona que ante tal intensidad de lluvias y anunció que las clases permanecerían cerradas a los largo del día de hoy.
Las incidencias en la carretera también obligaron a evacuar a una docena de niños del Preventorio de El Real de Gandia, aunque no porque peligrará la seguridad de los alumnos, sino por el corte del vial de acceso. Según explicó el alcalde Gustavo Mascarell, las clases estaban suspendidas desde primera hora, pero muchos padres, a pesar de que no había riesgo, quisieron recoger a sus hijos del internado. Los desperfectos en varios caminos rurales afectaron a varios puntos de la Safor como Ador o Rótova, además del desprendimiento de un muro en las Cumbres, en Marxuquera.
El episodio de precipitaciones dejó en la Marina Alta más de 68 litros en L'Atzúbia, según Avamet. En Dénia, la lluvia obligó a cerrar de forma preventiva el paso inferior del ferrocarril en la zona del Pinaret d'Elies y por la tarde se cortó un tramo del camí del Llavador, junto al IES Maria Ibars. En el camí de la Bota también se produjeron importantes acumulaciones de agua en la calzada. En la ciudad se llegaron a sobrepasar los 67 litros por metro cuadrado.
En la Ribera la lluvia obligó a cortar varios caminos secundarios y Benifaió y Senyera suspendieron las clases ante la fuerza del temporal. En Montserrat la acumulación de agua provocó el desprendimiento de tierra en un solar cercano al centro de salud. No hubo daños pero el muro antiguo que se encontraba en este solar cedió y la tierra y las piedras llegaron a la calle.0
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