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JUAN SANCHIS
Domingo, 15 de mayo 2022, 23:59
Manos Unidas en Valencia, la ONG de la Iglesia Española que lucha contra la pobreza en el mundo, continúa con su labor un año más. En esta ocasión tienen en marcha diversos proyectos en África, Asia e Iberoamérica.
En estos momentos, las acciones se enmarcan en la campaña 63, que lleva por lema 'Nuestra indiferencia los condena al olvido'. Se trata de «una denuncia de la indiferencia de los países ricos hacia millones de personas de los países del sur, que tienen rostro, sentimientos, necesidades básicas y que están privadas de los derechos fundamentales y de la dignidad que les corresponde», tal y como destaca Ana Ruiz, la delegada de la ONG Manos Unidas en Valencia.
Una de las acciones que promueve la ONG es el programa 'Erradicación del Trabajo Infantil en los Campos de Té de Dhubri' con un coste de algo más de 38.000 euros. El proyecto se localiza en los campos de té de Bahalpur y Choibari a lo largo de 23 aldeas en el distrito de Dhubri en el estado de Assam, situado en el noreste de la India. Desde hace más de un siglo padecen bajos salarios, viviendas deficientes y falta de carreteras, hospitales y escuelas. No tienen derechos a poseer tierras y sólo el 30-40% de ellos son empleados fijos. Se han identificado a 1.500 niños de entre 6 y 15 años, y 511 menores de 5 años; de todos ellos, sólo 750 van a las escuelas de las plantaciones.
El proyecto tendrá una duración de dos años y, entre otras acciones, comprende la puesta en marcha de centros de apoyo extraescolar con clases de refuerzo después de clase o diversos campamentos como uno de verano u otro para hacer chequeos médicos.
Manos Unidas a nivel nacional financia en esta campaña 474 proyectos. En Valencia se ponen en marcha varios en relación con el tema de la educación, la salud, el agua y saneamiento, derechos de la mujer y equidad, derechos humanos y sociedad civil, alimentación y medios de vida y medio ambiente y climático.
Uno de estos programas tiene lugar en la India y está destinado a la reducción de la malnutrición infantil en 45 aldeas tribales, iniciativa que beneficia de forma directa a cerca de 2.000 niños de hasta 6 años y de manera indirecta a 400 familias.
El proyecto se desarrolla en 45 aldeas de dos distritos de Gandhinagar, ubicado en el Estado de Gujarat, en el oeste de India, «una zona montañosa, muy atrasada, sin industria y con comunicaciones limitadas donde la agricultura sufre la falta de agua, y que está habitada por la población tribal Dungri Garasia: la mayor parte son granjeros margínales», han indicado desde la entidad.
El nivel de alfabetización es de 32,66% para los hombres y 17,07% para las mujeres y aunque viven de la agricultura, «el suelo es pobre y el rendimiento de las cosechas insuficiente para cubrir las necesidades básicas de las familias, lo que obliga a los padres a emigrar durante varios meses en busca de trabajo».
Esta situación «limita la seguridad económica de las familias y, por lo tanto, su seguridad alimentaria, lo que da lugar a malnutrición y enfermedades».
A través del proyecto se realiza un seguimiento, motivación y formación de madres lactantes y niños menores de 6 años y se imparte formación para trabajadores de salud de las aldeas y socios en temas como malnutrición, lactancia materna y complementos alimentarios, derecho a la alimentación o preparación de comida nutritiva.
Por otro lado, Manos Unidas Valencia colabora con la congregación de Religiosas Adoratrices Esclavas del Santísimo Sacramento y de la Caridad (CRAESSC) en un proyecto de formación en Lima que beneficia a 1.460 mujeres, en su mayoría adolescentes y jóvenes en situación de riesgo o víctimas de trata, violencia y explotación sexual.
Las jóvenes, adolescentes a partir de 15 años, «reciben formación en la Casa Santa Micaela, situada en el centro de Lima y gestionada por las Religiosas Adoratrices, que las preparan para prevenir y superar su situación y exigir sus derechos en un espacio seguro en el que, además, se forman para ganarse la vida con las habilidades aprendidas», han indicado desde Manos Unidas Valencia.
Por otro, lado la entidad ha organizado para el próximo 10 de junio una cena del hambre. Se trata de un acto emblemático que consiste en reunirse para tomar una cena austera (pan con aceite y sal, agua y una fruta) y se dona el importe de una cena habitual para financiar los proyectos de la ONG.
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