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La base militar de Rabasa, en Alicante, ha sido escenario esta madrugada de unas maniobras para entrenar asaltos en el contexto de conflictos armados. Bajo la luna llena, se han ejercitado alrededor de 400 efectivos entre los que se incluyen miembros de los Marines de los Estados Unidos que tripulan dos helicópteros de alta tecnología desplazados para la práctica.
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La mayoría de los militares de las maniobras proceden de la propia base de Rabasa. Son los boinas verdes del Mando de Operaciones Especiales (MOE), guerrilleros de élite entrenados para las intervenciones tácticas más complejas. También se han ejercitado, entre otros, miembros de las Fuerzas Armadas de otras unidades como los equipos de NBQ (Nuclear Bacteriológico Químico).
Entre otras actividades, se han desarrollado simulacros de descensos nocturnos de los helicópteros sin tomar tierra, propios de operaciones muy rápidas y sorpresivas.
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