Las monjas del convento de la Trinidad asumen la organización de las visitas de los turistas

Estas visitas, precisan fuentes del Arzobispado, se realizarán ahora bajo demanda. Las Siervas del Hogar de la Madre han rescindido el contrato con la empresa que hasta ahora gestionaba las visitas y las atenderán de forma directa. Además, estas serán gratuitas. Las mismas fuentes han precisado que nunca ha existido un contrato de exclusividad del Arzobispado con ninguna empresa.

Desde el Arzobispado señalan que «el Convento de la Trinidad nunca ha suspendido ni interrumpido las visitas turísticas, sino que canceló la gestión de la empresa, de manera que las Siervas del Hogar de la Madre efectúan la gestión directa, haciendo gratuito el acceso para los visitantes, y bajo demanda».

El convento de la Trinidad fue uno de los principales enclaves en la Valencia del siglo de Oro valenciano. Allí se reunían con sor Isabel de Villena autores de la talla de Jaume Roig, Joanot Martorell o Ausias March. En 2014 fue abandonado por las monjas clarisas por la falta de vocaciones y en 2018 fue ocupado por las Siervas del Hogar de la Madre que se ocupan de ayudar a los capellanes del Hospital Clínico con visitas a enfermos y también acercan la Comunión a quienes la solicitan en el centro sanitario. Además, dan catequesis en varias parroquias (como la de San Dionisio en Valencia o la de San Bartolomé y San Jaime en Nules).

El convento fue erigido en el siglo XV. Las nuevas ocupantes del convento visten hábito blanco y son jóvenes, entre los veinte y los 40 años, circunstancia que llama la atención en tiempos en los que las vocaciones no son frecuentes, aunque apunta la hermana María que la congregación -nacida en Toledo en 1984- «tiene vocaciones».