Una mujer muere al arder la planta baja en la que vivía en el Cabanyal

El barrio del Cabanyal se ha despertado conmocionado. Los vecinos se arremolinaban delante de la puerta de Blanca. Un lugar que han frecuentado varias veces porque, hasta que se jubiló hace unos años, era la papelería de referencia para los vecinos de la Calle de la Reina.

Hoy han sido testigos de cómo la Policía Científica sacaba el cuerpo sin vida de aquella mujer que siempre les atendía con una sonrisa. La fallecida tenía 60 años. Su vivienda se ha incendiado a primera hora de esta mañana. Su cuerpo no ha podido soportar y ha muerto por inhalación de humo. Aunque el SAMU ha acudido a la vivienda de Valencia nada más recibir el aviso y han intentado reanimarla no lo han conseguido.

Todavía se desconocen las causas exactas del incendio, pero sus vecinos la conocían bien. Uno de ellos recuerda: «Siempre solía tener incienso en casa. A lo mejor se quedó dormida y se le cayó al suelo y así se produjo el incendio de la vivienda». Los testigos no se van del lugar hasta que no lo hace la Policía Científica. Se niegan a dejar sola a Blanca y, entre ellos, hablan y se consuelan. Hasta a aquellos que la conocían de vista se les nubla el rosto cuando pasan por el portal y ven los barrotes deformados por el incendio. Y la acera llena de agua en un intento de los bomberos de apagar rápido el fuego para conseguir salvarla.

«Qué pena me da. Pobrecita...», dice una viandante con la que coincidía en la peluquería. Blanca era una mujer muy conocida. Aquellos rostros que se vuelven una parte simbólica de la identidad de un barrio. Para ellos, es impensable que su tendera de toda la vida no vaya a volver. Que no vayan a verla paseando nunca más por la calle de la Reina.

Todos la definen de la misma manera: «Era una muy buena persona. Muy agradable». También recuerdan que se separó de su marido hace unos años y que su hija vive en Londres y la Policía no había conseguido contactar con ella para darle la mala noticia.

Fueron los vecinos los que dieron el aviso a Emergencias al ver el humo e intentar contactar con Blanca y ver que no respondía. Sus vecinos la recuerdan de manera vívida. Una de las vecinas la recuerda como una mujer muy trabajadora. Bohemia. Cuando piensa en ella la recuerda llevando sus gorritos de lana. Y también ir a su tienda a comprar el material de oficina.

Al parecer, la mujer residía en el bajo que antiguamente regentaba y que usaba como vivienda desde que se había jubilado. Al lugar han acudido bomberos municipales y el retén del juzgado de guardia para proceder al levantamiento del cadáver. Hasta que la Policía Científica no ha retirado el precinto para impedir que nadie pasara por la zona, los vecinos no se han alejado de aquella vivienda del toldo rojo. Después se han vuelto a sus casas, con la pena de saber que Blanca no regresará.

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