Multas de 750 euros por bañarse en el Parque Central de Valencia

El Ayuntamiento de Valencia multará con hasta los 750 euros el baño en los estanques y en las fuentes ornamentales del Parque Central. Así lo indica la nueva señalética colocada en las instalaciones.

Además, se ha puesto en marcha junto con la policía local un sistema de vigilancia exhaustiva en el parque para el cumplimiento de la ordenanza. También se han instalado cámaras de video vigilancia con el mismo fin.

Juan Carlos Caballero, concejal del Área de Parques, Jardines y Espacios Naturales, insiste en que «las fuentes ornamentales no son piscinas. Aunque la cloración y limpieza se realice, no son piscinas y hay una ordenanza que cumplir».

Las fuentes del parque dejaron de expulsar agua el día 20 de julio tras una orden del Consistorio. La intoxicación de siete menores, de edades comprendidas entre los dos y nueve años, hizo saltar las alarmas. La Consellería de Sanidad se encargó de analizar el agua de los aljibes y fuentes en busca de la bacteria protozoo cryptosporidium.

Según los datos recabados, la infección pudo haber sido provocada por el «acceso indebido» a las láminas de agua y las fuentes. «Aquí se bañaban y compartían el agua niños y personas mayores junto con perros y otros animales. Eso es lo que ha provocado la presencia de microorganismos», ha afirmado Caballero. Desde el Ayuntamiento recordaron que está «totalmente prohibido» el baño, dado que esas aguas «no reciben tratamiento como aquellas en las que sí se permite el baño por parte de los usuarios».

El concejal ha explicado que «se han instalado sistemas automatizados, que ya están en funcionamiento, para realizar una hipercloración cada dos días». Además, el Ayuntamiento tomará muestras para analizar los aljibes, los canales y las láminas de agua para comprobar periódicamente su estado.

Por su parte, Carlos Mundina, concejal delegado del Ciclo Integral del Agua ha recordado que existen repartidas por toda la ciudad tanto las tradicionales fuentes bebederos de agua potable, señalizadas como aptas para el consumo humano, así como las 25 fuentes municipales refrigeradas. Además, han destacado que el único punto, de carácter lúdico, habilitado en todo el Parque Central para refrescarse y jugar con el agua es la llamada 'zona de los chorros'.

Medina apela directamente a la responsabilidad de los adultos para cumplir esta norma porque «los niños que entran en las fuentes ornamentales siempre van acompañados, ya sea de sus padres o de cuidadores». Para evitar situaciones como la que ha acontecido este verano habrá que «disfrutar del parque con cabeza y cumpliendo la ordenanza».

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