Fallece el sacerdote valenciano Julio Ciges, párroco de María Inmaculada de Vera durante 28 años

El sacerdote valenciano Julio Ciges Marín, natural de Anna, párroco de María Inmaculada de Vera-Carrasca, en el barrio de la Malvarrosa de Valencia desde 1994, ha fallecido esta madrugada a los 75 años de edad.

La misa exequial por su eterno descanso será presidida mañana, sábado, por el Arzobispo de Valencia, Enrique Benavent, a las 16 horas, en la iglesia parroquial La Inmaculada Concepción de Anna. Acto seguido será inhumado en el cementerio de su pueblo natal.

La capilla ardiente será instalada esta tarde de viernes en su casa familiar de Anna, en la plaza de la Iglesia.

El próximo domingo 18 de diciembre se celebrará una misa funeral en su parroquia de María Inmaculada de Vera de Valencia, en la que era párroco.

Julio Ciges recibió la ordenación sacerdotal en Valencia en 1973 y su primer destino fue como vicario parroquial de San Marcelino Obispo de Valencia hasta 1985, cuando fue nombrado párroco de San Ramón y San Vicente Ferrer, de Xirivella.

En 1994 fue designado párroco de María Inmaculada (Vera-Carrasca) donde ha ejercido durante tres décadas.

Cabe recordar que el 3 de diciembre se le rindió un cálido homenaje en la parroquia de la Inmaculada de Vera, donde participaron muchos colectivos del barrio de la Malvarrosa.

No hay que olvidar que Ciges recibió una de las máximas distinciones de la Malvarrosa que otorga la entidad vecinal Amics de la Malva. En el discurso que acompañó al reconocimiento, los vecinos recordaron que querían subrayar que en estos más de 25 años «se ha significado por un cristianismo de base, abierto, progresista y cercano a las clases obreras y más necesitadas».

También indicaron que, como miembro activo del grupo 'Els Rectors del dissabte', según indican los vecinos, «reivindicó una Iglesia abierta, dialogante y cercana a os sectores populares y obreros».

Destacaron que en 2001 Julio Ciges «acogió durante tres meses a medio centenar de inmigrantes ecuatorianos que demandaban trabajo y reconocimiento legal. Y en 2003 se posicionó públicamente en contra de la guerra de Irak. Así mismo dieron apoyo a las víctimas del accidente del metro».

En este documento los vecinos también destacan de Ciges que «demandó la presencia del valenciano en las celebraciones eucarísticas, no como un deseo sino como una realidad y vino dando de ello en su parroquia».

También argumentaron que desde la parroquia de la Inmaculada de Vera «animó la creación de la fiesta de la solidaridad de la Malvarrosa y fomentó durante quince años la animación sociocultural y la cooperación con proyectos solidarios».

Por eso, concluyeron que Julio «ha sido un párroco cercano a sus feligreses y se ha involucrado en la vida vecinal y cultural de la Malvarrosa y ha dejado huella en sus destinos, tanto en San Marcelino, como en Xirivella y en su Anna natal, donde procuraba retirarse para ver a su familia y a sus paisanos, con quienes conserva los lazos desde la infancia».

Precisamente en su Anna natal el Ayuntamiento decidió dedicarle una calle, acto que precisamente se realizó también este mes de diciembre.

El portavoz de Amics de la Malva, Pau Díaz, detalla que «Julio Ciges ha sido una persona importante para el barrio, uno más de la larga lista de personas cristianas progresistas presentes en las luchas de la Malvarrosa. Participó en las movilizaciones y asambleas que los últimos años hemos llevado adelante por un barrio digno siempre que su delicado estado de salud de los últimos años se lo permitió».

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