Obras Públicas afirma que «no se hará nada» en la autovía de El Saler sin el apoyo vecinal

valencia. El descontento vecinal apoyado por los alcaldes de las pedanías y municipios del sur remueve los planes previstos para la autovía de El Saler. La multitudinaria protesta frente al Ayuntamiento parece traer cola esta semana. A ello se suman las declaraciones de Ribó en el pleno municipal del jueves, en las que pedía a la Conselleria de Obras Públicas modificaciones en el proyecto.

No sorprende que siempre se haya declarado la coordinación en este asunto entre ambas autoridades, porque ahora el responsable del área en la Comunitat, Arcadi España, también echa el freno de mano al mismo estilo que lo hizo Ribó un día antes. España dijo ayer que «no se va a realizar ninguna obra en la autovía CV-500 sin el acuerdo de los vecinos y alcaldes».

Tras el pleno del Consell, España se mostraba rotundo en esta cuestión y manifestó su alegría frente a las declaraciones del alcalde de la ciudad porque dijo «se suman a lo que la consellería lleva diciendo desde hace días». Así, reiteraba que «no se hará nada que no esté consensuado con alcaldes y vecinos de los alrededores de la carretera». Recordó que la Conselleria ya se ha reunido en varias ocasiones con los alcaldes de los pueblos afectados y «continuará esa labor».

El proyecto del programa de paisaje de la conselleria que en estos momentos, se encuentra en exposición pública, pretende reconvertir la autopista de El Saler en un bulevar con carril bici y quitar dos de las cuatro vías al tráfico, dejando uno por sentido, mediante diversas actuaciones a lo largo de 10 años. Proyecto sobre el que Ribó pidió las modificaciones sin especificar a qué cuestiones se refería.

El vicealcalde del Ayuntamiento, Sergi Campillo, tampoco confirma a qué se refiere el alcalde pero explicó que en estos momentos ya se están realizando cambios de pacificación de la carretera en algunos puntos, como la instalación del semáforo, aunque matiza que estas actuaciones son «diferentes» a las del proyecto.

«Una cosa es la pacificación de la carretera, en la que tenemos un compromiso irrenunciable para su compatibilidad con los valores del parque natural y para no matar a la gallina de los huevos de oro de esos municipios y otra cosa es el programa de paisaje», manifestó por último el edil.