Una oleada de robos en dos semanas pone en jaque a seis urbanizaciones de Chiva

En su modus operandi, optan por chalés de dos alturas y trepan por las marquesinas para llegar a las ventanas. Una vez dentro buscan principalmente dinero y joyas en las habitaciones, sobre todo en las mesitas de noche, y en los recibidores, aprovechando la hora de la cena.

"Son jóvenes, altos y delgados", señalan algunos de los afectados que ya han "fichado" a los ladrones y tienen imágenes grabadas de los robos. Además, apuntan que "deben de ser de la zona, puesto que se conocen caminos que conectan las diversas urbanizaciones y que solo utilizamos los que vivimos aquí".

Los hechos se repiten por igual en El Bosque y Olimar, a pesar de que cuentan con vigilancia privada, y también en Serra Perenxisa, Carambolo, Casa Parra y en el Polígono. En Olimar se han llegado a producir dos robos en una misma noche. En uno de ellos, los propietarios "estaban en el planta baja viendo la tele cuando oyeron ruidos en el piso de arriba, al entrar en la habitación los vieron salir por la ventana", explican.

En otro caso, "había una persona cocinando y la abuela estaba durmiendo al nieto en el primer piso, mientras los ladrones estaban robando en el salón". "Aquí viven cazadores que tienen armas y al final va a pasar algo grave", comentan desde la entidad vecinal, reclamando una mayor presencia policial.

En la urbanización Carambolo, los residentes cuentan cosas similares. "La semana pasada hubieron tres robos el mismo día. En uno de ellos, una mujer mayor, impedida, estaba en la casa y cuando llegaron los propietarios estaba todo revuelto", explican. Muchos vecinos ya han optado por instalar alarmas.

Ante esta situación, los representantes vecinales han solicitado una reunión con el Ayuntamiento para trasladar sus temores a las autoridades locales y reclamar mayor presencia policial en las urbanizaciones. "Dicen que solo hay registrados tres robos, pero es porque la gente no quiere denunciar", señalan, "pierdes toda una mañana para poner la denuncia y si no tienes seguro no sirve para nada".

En este sentido, se quejan de que los robos no se investigan, "solo hacen acto de presencia, las veces que acuden a las llamadas, porque a veces ni eso", explican. "Tenemos un retén policial aquí pero no sirve de nada si no hay más efectivos", añaden y apelan a que "pagamos los mismos impuestos que los vecinos del caco urbano pero tenemos menos servicios".

Los residentes explican que siempre se han producido robos en los meses de octubre a febrero, "estamos acostumbrados", pero denuncian que en esta ocasión "es exagerado". El año pasado, por ejemplo, en el mismo periodo se contabilizaron solo tres.