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Cuando estamos inmersos en políticas de ahorro energético, sorprende ver que seguimos teniendo autovías iluminadas. Ya quedaba bastante raro antes, porque las arcas públicas no ... están holgadas, lo habitual es que cabalguen sobre déficits, y tampoco se ve la necesidad de tal lujo. ¿Acaso es que los vehículos que circulan por estas vías flanqueadas de bosques de farolas carecen de faros propios? Naturalmente que no. Entonces ¿qué sentido tiene tal despilfarro? Mucho más en las circunstancias actuales de ahorro obligado.
Hace unos años preguntamos a un alto cargo de la Generalitat por la razón de esta pauta oficial de iluminar a tope autovías y también rotondas en medio de la nada. Es por seguridad, dijo. Y se quedó tan pancho. ¿Por seguridad? ¿Será porque los coches circulan por allí con sus luces apagadas? ¿Podremos concluir, en consecuencia con tal aseveración, que las demás vías, las que siguen sin farolas, son inseguras? ¿Si vale para unas, por que no sirve para todas? Podrían iluminarlas todas a la vez, en el colmo de la exageración.
La verdad es que no tiene sentido. Ni antes ni mucho menos ahora. Obligan a apagar escaparates, a reducir iluminaciones por todos lados, en plan de repetir aquella consigna antigua: «Aunque usted pueda pagarlo, España no puede», pero sin atreverse a decirlo así; nos arengan incluso para que nos duchemos menos -menuda recomendación antihigiénica- y hasta que lo hagamos con brevedad y sin agua caliente -van a proliferar gripes y catarros-, como si nos sintiéramos de repente recluidos en cenobios con disciplinas penitenciales, y donde de verdad se puede recortar, apagando las luces inútiles de autovías, permanecen como si nada. Somos ricos y esto es Jauja. Hagan lo que yo diga, no lo que yo haga. Lo de siempre, pero con menos miramientos que nunca, porque se predica con el ejemplo, y éste es un mal ejemplo.
Es también mala pauta, esta moda de iluminación inútil, porque se está propiciando que quienes salen del casco urbano y enfilan una autovía, a renglón seguido de la avenida correspondiente, no note diferencias: dos o tres carriles por banda y a plena luz ambiental; luego es lo mismo. Por tanto, se circula en abundancia por los carriles del centro o de la izquierda, cosa que es permitida en el ámbito urbano, para facilitar maniobras de cruces y desvíos, pero no fuera de la ciudad, donde hay que ir por el carril de la derecha. Y además se ven cada día -o noche- más vehículos que se adentran en autovías con las luces apagadas. Claro, están inmersos en la 'ciudad-luz' que se prolonga por el campo y no se enteran. En la ciudad hay peatones por las aceras que necesitan luz, pero en la autovía no.
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