El Botánico dice que roja, pero se tragó la azul

Cuando el Botánico llegó al poder, Morfeo se plantó delante de ellos, como en 'Matrix', y les dio a elegir entre dos píldoras que tragarse para transitar por la Generalitat: entre la roja, que les permitiría vivir en la incómoda verdad; o la azul, que les situaría en un estado catatónico propio de aspirantes a protagonizar un 'reallity show' de Telecinco. El Botánico dice que se comió la roja, que el color le molaba más.

Y así, hasta hace nada, los funcionarios iban a trabajar con horario de fallas... pero no habrá Fallas. Y de este modo, en el punto álgido de los contagios se quiso celebrar algo que olía, se movía, sonaba y sabía a cabalgata de Reyes en Valencia mientras el Ayuntamiento y su Sección de Palmeros alega que no fue una cabalgata. La pastillita que se han zampado les permite dejar pasar un año, con sus noches y sus días, sin articular un decreto que regule el trabajo a distancia de sus propios empleados. Sin embargo, ponen millones de euros sobre la mesa para comprar material informático que les permita adaptarse a ese trabajo a distancia, pero sin actualizar el corpus legal sobre el que se sostiene el teletrabajo de miles de personas, miles, que dependen laboral y directamente de ellos. A pesar de esta epatante demostración de inutilidad e impotencia ante una situación excepcional, el Consell promueve la implantación de jornadas laborales de cuatro días. No son capaces de ponerse de acuerdo para modernizar el decreto por el que su plantilla debe trabajar desde casa (justo cuando el teletrabajo es la única solución para evitar el colapso sanitario y administrativo), pero pretenden meter un meneo histórico a la semana laboral. Y mientras, una consellera abandera una iniciativa lisérgica para reformar el Estatut.

En Presidencia, por su parte, están ufanos porque Oltra ha defendido a Puig dos semanas seguidas en Les Corts frente a las movidas que el PP apunta sobre el hermano del presidente. Pero tanta alegría no les impidió adelantar y filtrar las medidas sanitarias que, en realidad, debían acordarse días más tarde en una mesa interdepartamental que los socialistas se pasaron por la arquería triunfal, una actitud por la que Oltra montó en cólera y la lió parda durante un glorioso mes de noviembre. Canta Tangana y Kiko Veneno en 'Los tontos': «Tú te has creío' que por ser yo bueno/ Tú puedes ir pisando por donde friego/ Crees que eres el sitio donde estoy cayendo/ Pero con las mismas que has venío' te puedes ir yendo/ Porque te advierto que me he cansa'o/ Que hasta los tontos tenemos tope».

Un día, los tontos demostrarán que tienen tope y el Botánico se enterará de que se la tragó azul, la píldora.