Ya dicen que el futuro pasa por compartir vehículo y que lo de tener un coche cada uno se va a acabar. Queda progre y sostenible utilizar energías renovables pero la realidad es que a día de hoy ni existe una red de abastecimiento suficiente, ... ni bolsillos que se puedan permitir pagar el descomunal coste de un coche eléctrico.
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Quienes nos desgobiernan parecen dispuestos a no facilitarnos la vida. Empecemos con el barrio del Carmen, Ciutat Vella o cómo evitar entrar con coche para que no te soplen 60 €. Si no estás dado de alta en el Área de Prioridad Residencial (APR) y transitas con tu vehículo por el barrio, pasas a formar parte del listado de ya más de 100.000 infractores a 60 € por barba. El caso es fundirnos a impuestos.
Para esquilmar un poco más el bolsillo de los valencianos, crean las nuevas zonas 'multicolor' para aparcar el utilitario en función de las horas, la condición de vecino, de trabajador y en breve, de la orientación sexual. Son las zonas verdes, naranjas, azules cuyo entendimiento lleva premio, léase:
En la zona verde solo pueden aparcar vecinos después de solicitar la tarjeta previo pago de 86,20 € al año. La zona naranja (también por 86,20 € al año) es para vecinos y no vecinos, aunque para los no vecinos funciona como zona azul, es decir que pueden aparcar solo en horario comercial previo pago del módico precio de 2,10 euros por hora. Suena a lo de «la parte contratante de la parte contratada» de los hermanos Marx, que desemboca en el barrio de Ruzafa como un solar y con los comerciantes de la zona que trinan.
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El ayuntamiento ahora cobra por aparcar en la calle a quienes no disponen de garaje, además de pasarnos religiosamente el impuesto de circulación cada año. Y mientras me explicaban ayer el funcionamiento de tantas líneas de colores, me preguntan: «¿No te has enterado de lo de Rafa Rubio?». A lo que contesto que «ni idea». Agárrense los «machos» porque el que fuera portavoz socialista en el ayuntamiento de Valencia y subdelegado de gobierno acaba de reclamar a la Guardia Civil que le pague el susodicho impuesto de circulación de un coche que le incautaron. Hecho que parecería dentro de toda lógica de no saber que la Fiscalía cree que pudo percibir hasta 750.000 €, acusado de cobrar comisiones por mirar a otro lado en ciertos proyectos urbanísticos.
El importe del impuesto del Mercedes es de 135 €. Hay quienes no tienen vergüenza ni la conocen y mientras, al resto de pobres desgraciados nos siguen fundiendo a impuestos a costa de la incompetencia de quienes nos gobiernan.
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