Ilusiones ópticas por Madrid
Y SI HABLAMOS DE EDUCACIÓN ·
La sobreinformación sobre la capital distorsiona el análisis valencianoPABLO ROVIRA
Martes, 8 de septiembre 2020, 07:20
Secciones
Servicios
Destacamos
Y SI HABLAMOS DE EDUCACIÓN ·
La sobreinformación sobre la capital distorsiona el análisis valencianoPABLO ROVIRA
Martes, 8 de septiembre 2020, 07:20
Una película es la sucesión de imágenes en movimiento, fotografías que pasan rápidamente ante nuestros ojos; basta con 24 fotogramas por segundo para que nuestra imperfecta visión acepte el engaño y lo que es fijo nuestra mente lo convierta en movimiento. Y es que la mente a veces nos engaña. Completa lo que no ve para trasladarnos un pensamiento asumible.
Lo hemos visto en los telediarios: las largas colas de profesores de Madrid para hacerse los test serológicos, las noticias de que unos miles han dado positivo, el debate de las cámaras en el aula o si las administraciones educativas han planificado o no a tiempo el inicio de curso. La educación madrileña es una ilusión óptica de la educación en la España de las autonomías. Creemos, o nos hacen creer, o más bien se empeñan en que lo creamos, que la escuela de la capital es el paradigma del resto de escuelas, y no lo que es realmente: la escuela de una autonomía más en un país en el que el Ministerio no tiene competencias de gestión educativa. Una ilusión óptica por distorsión, de tal forma que la visión autonómica, en ocasiones, no se acepta por la mente política y mediática, y entonces surge esa imperfección neuronal que rellena la imagen que nos llega incompleta o distorsionada. Y así los telediarios nos informan si llueva o hace sol en la meseta y aquí sacamos o no los paraguas. Más cuando se convierte en ariete político -los sindicatos mantienen la huelga para final de mes- y sirve como antagonismo. El propio conseller valenciano se comparaba con Madrid en una reciente entrevista.
La política educativa valenciana, además, ha tendido a esta comparación, antes con afán de similitud y ahora de opuestos. Ya digo, no es una comparación particular, pues igual que puede ser Madrid podríamos fijarnos en otra autonomía, ni su política escolar es más referente pese a que salga más en las noticias, o de ella se hable más en las redes sociales. De hecho, es difícil la comparativa y, puestos a compararnos, la valenciana encontraría más contexto similar en Murcia, a menor tamaño, o a Andalucía. Pero no luce esa comparación.
La competencia escolar es mayor que la que existe en la Comunitat, con una privada mayor y una concertada con mayor exigencia de captación. Pese a todo lo que se decía en la época de gobierno popular, la concertada valenciana es muy diferente a la madrileña con una fuerte expansión de esta red a través de la cesión de suelo público mientras, en cambio, la Comunitat optó por ampliar los conciertos en etapas no obligatorias. Es decir, la concertada en Madrid se expandió en horizontal; en la Comunitat, en vertical. También hay mayor diversidad de proyectos educativos, sea por tamaño y competencia, en Madrid que en Valencia. Tampoco, pese a lo que quedó en la imaginación colectiva, aquí rige el distrito único -estuvo vigente un par de cursos- como en Madrid. Error que se ha visto en muchos estudios sobre la llamada segregación escolar y otros, que los datos de Madrid se hacen pasar por los de España, cuando según PISA la equidad valenciana está a la altura de Europa.
El problema de esta distorsión inconsciente -mediática- o interesada -política- es que nos llena de broza el análisis de la escuela valenciana, y se convierten en tópicos cuestiones que no son realidad en nuestras aulas. Además, hablar de la educación madrileña es un todo o un nada en Valencia, cuando aprender de ella, o no, como de cualquier otra.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Recomendaciones para ti
Favoritos de los suscriptores
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.