Operación anti cabalgata

Desde la corporación municipal se descuelgan con no invitar a empresas privadas para participar con sus carrozas en la cabalgata de Reyes Magos. Alegan que, según los criterios de las autoridades sanitarias, «es conveniente reducir la duración del acto para evitar que el público tenga que estar presenciando la cabalgata durante un tiempo prolongado». Veamos, ¿por qué reducir un acto que se celebra en plena calle al aire libre si todos llevan mascarillas? La intención no es otra que la de ir enterrando el verdadero espíritu de la Navidad y un año más se consolida la renovación de los contratos a la misma empresa para los servicios de coordinación artística de los espectáculos de la cabalgata y de la feria de Expojove. Curiosamente ésta última que se celebra en recinto cerrado, no sufre ninguna modificación y parece que aquí «las autoridades sanitarias» no tienen nada que decir.

Al final lo que pretenden es presentar una cabalgata tematizada más en la línea del Circo del Sol que con los elementos coherentes que identifican y argumentan la Navidad. Este año nos podemos encontrar con una cabalgata que gire en torno a peces voladores y en algún hueco aparezca una pequeña carroza con Melchor, Gaspar y Baltasar.

El gremio de carroceros paga la incompetencia del gobierno municipal valenciano sumando otro año sin facturar en Navidad. Con suerte están a tiempo de alquilar sus carrozas para otras ciudades pero atemorizados de que la decisión tomada en Valencia (Mordor), se contagie a otras poblaciones.

La antítesis sigue siendo Madrid con sus calles engalanadas como lo que es, una de las grandes capitales de Europa. En Valencia solo se gobierna para gustos de una parte de la ciudadanía, de ahí el repelús que se respira con la Navidad (cristiana) no es el mismo que con el desfile de las reinas magas, acto sin sentido que persigue rescatar una fiesta en época del gobierno republicano.

Ofrecer a los niños una versión irreal y reducida de la cabalgata también es una estrategia de educación, dirigida a fomentar las ideas de quienes actualmente nos gobiernan.