Vacuna contra el Gobierno

Pongo la radio, escucho al ministro Illa como si lo viera, jeringuilla en mano, asegurando que nos va a inyectar la vacuna en vena en diciembre si la cosa va muy bien, sin tener la certeza de tenerla. Qué ilusión ¿no cree?, pero ¡caramba! mienten más que hablan. Dentro del gran equipo de incompetentes de Sánchez, el ministro que más se puede acercar al perfil de un científico es el astronauta Pedro Duque, responsable de la cartera de Ciencia, y ya ha soltado que no ve tan claro que los plazos se vayan a cumplir, entre otras cosas, porque aún están ultimando la negociación y no está firmado el contrato con el laboratorio Pfizer. En segundo lugar y teniendo en cuenta que los plazos de la ciencia no son los de la política, queda mucho camino para que la vacuna salga al mercado. Hace dos días anunciaron desde el laboratorio americano Pfizer que la efectividad de su vacuna es del 90%, alimentando la euforia perdida por el maldito virus a lo largo de estos meses. Como consecuencia subieron los valores en bolsa y quién sabe si no sirvió el anuncio como captación de nuevas inversiones económicas para el mencionado laboratorio. ¿Sería una noticia interesada, incluso beneficiosa, para que el gobierno nos venda la moto? A nosotros ya nos la han vendido al asegurar que en mayo estará gran parte de la población vacunada y cuando dicen tener ya, sin haber firmado, 20 millones de dosis para 10 millones de españoles, ya que se necesitan dos tomas por persona.

Sin duda la noticia es un gran paso, pero ni mucho menos tan definitivo como la realidad de la miseria que se está llevando al hoyo a autónomos, hosteleros, taxistas o pequeños comercios. El hambre mata más que el virus y muchos no soportarán esta situación hasta la aparición de la vacuna. Las restricciones obligan al cierre temporal del comercio, pero no a la reducción de los gastos y el gobierno no hace nada para remediarlo. No disponen de vacuna para la economía. Ni tan siquiera de tratamiento. Ineptos. El laboratorio del Gobierno es una gran fábrica de mentiras como la de las prestaciones, que muchos siguen sin poder cobrar y que está obligando a miles de familias a hacer cola para conseguir comida en las instituciones benéficas. Es mentira que la vacuna esté pronto disponible, es mentira que España tenga ya 20 millones de dosis, es que es imposible vacunar a toda la población en estos plazos. Tiene bemoles que el gobierno quiera controlar las fake-news de los medios. ¿Y quién controla la basura informativa que nos mete a diario este gobierno?