«Et quo ego vado scitis et viam sciti»

Un grupo de militantes del PPCV, de simpatizantes y de distintas personas de pensamiento del centroderecha, decidimos hace tiempo, primero reunirnos para hablar de política en general y de las preocupaciones de nuestra tierra en particular y, más tarde, formalizar en un Foro de debate nuestros encuentros y actividades.

Desde 2015 la izquierda y el conglomerado catalanista en coalición están asfixiando nuestra economía y nuestras opciones de prosperidad.

La sociedad valenciana liderada políticamente por el PP alcanzó cotas de empleo y bienestar, de proyección y modernidad y de inversiones en colegios y hospitales y en equipamientos, como nunca antes había ocurrido. Hoy nuestra sociedad está desmoralizada y sin proyecto alguno.

Como el mero análisis, o la crítica puntual, no nos seducía, pensamos que era y es bueno siempre plantear crítica y soluciones de manera pública, con sentido de amplia participación.

Y así ha sido. Recuperar el patrimonio político de los gobiernos del PP, ensalzar la figura de Rita Barberá, injusta e inhumanamente maltratada después de un cuarto de siglo de excepcional y aplaudida gestión como alcaldesa, y mirar al futuro procurando la suma de votos del centro derecha en una misma opción, único camino para cambiar a bien las cosas en nuestra comunidad autónoma y nuestras ciudades.

Con publicaciones ya editadas y con reuniones en foros muy amplios en número, con libertad de entrada y participación, pese a un año tan complejo por la pandemia, además de en las redes sociales, hemos ido haciendo camino con esos únicos propósitos, y pretendemos continuar.

La amplitud de miras hace que no nos impliquemos en grupo en las cuestiones internas del partido al que pertenecemos, muchos de nosotros desde hace décadas.

Tanto es así como que del propio Foro hay personas que ocupan cargos orgánicos en distintas instancias y otros no. E incluso, según territorios, algunos a título personal han participado activamente en congresos, liderándolos.

Aquí muchos ya hemos sido responsables orgánicos o cargos públicos, como para que alguien pretenda confundir nuestra verdadera vocación, la de pensar y proponer ideas y argumentos.

Quienes preguntan ¿dónde vamos?, legítimo interés no obstante, primero han de preguntarse ¿qué han hecho para cambiar las cosas, tal y como están?.

El espectador que no se inmiscuye no tiene responsabilidad, pero el observador que influye tiene que presentar credenciales para tener suficiente autoridad.

«Ande yo caliente y ríase la gente», no es precisamente el compromiso del Foro que presido. Con Juan Pablo II, creemos habernos comprometido como respuesta valiente de quienes no queremos una vida al margen, sino que deseamos ser protagonistas de nuestra historia personal y social, independientemente del trabajo político realizado o las aspiraciones personales de cada persona que compone el propio Foro.

Pensar libremente y proponer seriamente esta demasiadas veces mal visto. Es un camino que, aunque incómodo, nos llena a quienes nos apasiona debatir. Y del debate siempre surgen ideas interesantes que aportar.

El centro derecha, por las derrotas electorales, necesita reencontrarse con lineas de actuación, mas allá del correspondiente ámbito de crítica diaria a la más que cuestionable forma de gobernar de la izquierda.

Y nosotros estamos precisamente para aportar, con quien quiera hacerlo desde otras ópticas, propuestas que enriquezcan la apasionante visión del futuro próximo, desde los principios de libertad, convivencia, prosperidad y bienestar.

Quo vadis? Al lugar a donde el centro derecha siempre ha tenido vocación de estar, gobernando, gobernando bien y gobernando para todos con propuestas serias y creíbles.

Estimado Pablo Salazar, creo contestada la pregunta.