Vuelven 'les covetes'

Por fin se van a restaurar 'les covetes de Sant Joan', las mismas que a principios del siglo XVIII se encargaron a Leonardo Julio Capuz, junto a puertas y gradas, bajo la terraza de la fachada de los Santos Juanes. La obra se cimentó sobre terrenos cedidos por la ciudad el 1 de agosto de 1700 para 67 años. Sin embargo, el 25 de febrero de 1720 la parroquia compró por 2.300 libras el usufructo temporal y alquiler de 'les covetes' para usos comerciales, especialmente de cacharrería. A lo largo de los siglos han sufrido traspasos y múltiples destinos, pero siempre vinculadas al entorno del Mercado Central.

Humildes, pequeñas y entre piedras húmedas con jaramillo, siempre pertenecieron al público popular y a los asombrados turistas, desde los escritores como Joseph Townsend y Antonio Ponz, a los visitantes del Imserso, se interesaron por curiosos oficios y ofertas. En las décadas que siguieron a la posguerra trabajaban quienes arreglaban pucheros, cazos y hornillos; también fueron frecuentes los puestos de gafas graduadas, a los que acudían los que obviaban al oftalmólogo y se probaban diversas lentes hasta encontrar lasque notaban más adecuadas. Siguieron los puestos de revistas y novelas de recambio; también objetos de loza para la cocina y relojeros que resolvían problemas con rapidez. Un mundo de vida gris que fue despareciendo junto con la utilidad de la terraza, desde la representación de algún entremés a la instalación de los altares vicentinos, donde los niños representaban milagros recitados en valenciano, y se entronizaba a la imagen del santo patrón.

Entre propósitos y proyectos municipales, como siempre sucede, ahora se confía en la actividad de la 'Associació Recuperem les Covetes'. Vamos a confiar en el impulso del alcalde, quién habló de puestos dedicados a la artesanía de nuestros pueblos: cerámica, cristal soplado, tallas de madera, figuras de cartón piedra y orfebrería moderna.

Ojalá suceda en 2021.