La pastilla que da esperanza a los enfermos de cáncer de pulmón

Los principales especialistas en el campo de este tipo de cáncer se han reunido este viernes en Valencia en el primer encuentro del proyecto CEBRA, un itinerario formativo y de debate sobre el abordaje integral de las metástasis cerebrales secundarias al cáncer de pulmón. Uno de los ponentes ha sido Ernest Nadal, jefe de sección de Tumores torácicos del Instituto Catalán de Oncología e investigador del Instituto Biomédico de Bellvitge. «Ahora hay terapias dirigidas que consiguen penetrar en el cerebro y logran controlar la enfermedad en una alta proporción de pacientes. Incluso con estas terapias de alta penetración cerebral conseguimos una tasa de desaparición completa de la enfermedad bastante elevada. Con una sola pastilla la enfermedad cerebral puede llegar a desaparecer o reducirse de forma muy importante. Esto consigue controlar la enfermedad a largo plazo», manifiesta a LAS PROVINCIAS.

El tratamiento para el cáncer de pulmón que reduce la metástatis cerebral es Brigatinib (Alunbrig), de la farmacéutica Takeda, que recientemente recibió el visto bueno del Ministerio de Sanidad como tratamiento frente al cáncer de pulmón no miocítico ALK+. Los ensayos clínicos han revelado que esta opción terapéutica tiene mucha eficacia sistémica e intracraneal, reduciendo el riesgo de muerte en un 69% de los pacientes con metástasis cerebrales. Según los ensayos, los enfermos que recibieron este nuevo medicamento vivieron más del doble de tiempo (unos dos años) sin que la enfermedad progresara que los que recibieron el tratamiento estándar.

Se frena la metástasis pero también el tumor principal en el pulmón. «En la afectación pulmonar también la respuesta de esta pastilla es concordante. Si responde el tratamiento en el cerebro, también responde fuera», señala el doctor valenciano, natural de Sueca. «Ese tratamiento es muy efectivo, retrasa el crecimiento del tumor, prolonga la vida con calidad pero no elimina totalmente la enfermedad. Llega un momento que se hace resistente, le pones un muro y al final consigue saltarlo. Los pacientes viven muchos años pero hay muchos que no se curan. Gracias a la investigación clínica cada vez tenemos terapias más efectivas, más capaces de controlar la enfermedad a largo plazo y revertir esas resistencias», establece Nadal.

Estudios científicos recientes revelan que entre el 50% y el 60% de los pacientes con cáncer de pulmón desarrollan metástasis cerebrales a lo largo de su enfermedad. La extensión de la enfermedad al sistema nervioso central supone un fuerte impacto en la calidad de vida y requiere de un abordaje clínico personalizado en el que intervienen diferentes especialistas, quienes necesitan mantenerse actualizados, dados los constantes avances que se producen en el diagnóstico, tratamiento y seguimiento de la enfermedad.

  Este es el objetivo del que evento de este viernes en Valencia, que ha contado con expertos de diferentes especialidades médicas. La iniciativa, que reúne a especialistas de las áreas de oncología médica, oncología radioterápica, neurología, radiología, y neurocirugía, ha sido impulsada por Takeda con la colaboración el Grupo Español de Cáncer de Pulmón (GECP) y cuenta con el aval del Grupo Español de Investigación en Neuro oncología (GEINO), además de la participación de la Asociación Española de Afectados con Cáncer de Pulmón (AEACAP).

«El cáncer de pulmón es el que más mortalidad causa en el mundo y en España, pero durante los últimos años hemos conseguido avances muy importantes tanto en el diagnóstico como en el manejo y el tratamiento de los pacientes. Cada vez se están diagnosticando pacientes de manera precoz y esto permite que se puedan curar», señala Nadal. «Pero en los que se diagnostican en procesos más avanzados los podemos tratar ahora con dos modalidades que han impactado muchísimo en las posibilidades de supervivencia. Son la inmunoterapia, que es activar el sistema inmune del paciente contra el tumor, y la terapia dirigida, que es dirigir terapias contra alteraciones muy concretas que tiene un paciente. Son alteraciones que dirigen ese tumor y que si las podemos bloquear con terapias moleculares dirigidas, se traduce en un beneficio muy a largo plazo», analiza el especialista valenciano.

La esperanza de vida está aumentando con el avance de la investigación. «Estos tratamientos requieren tomar pastillas, venir al hospital, pero muchos pacientes que están haciendo estas terapias tienen una buena calidad de vida y estamos intentando prolongar la supervivencia. Depende de una gran variabilidad, hay pacientes que evolucionan de forma más agresiva y no responden, pero también hay pacientes con metástasis que están vivos muy a largo plazo, a cinco o siete años tenemos la enfermedad controlada y esto es inaudito. Hace unos años cuando sólo teníamos la quimioterapia muchos pacientes vivían menos de un año. Hoy se ha transformado eso totalmente gracias a estos nuevos tratamientos», expresa.

El facultativo investigador asegura que actualmente existen «diez terapias diferentes dirigidas a esas alteraciones moleculares. Esto podría llegar a beneficiar al 40% de los pacientes con cáncer de pulmón, que podrían recibir una terapia específica», añade Ernest Nadal. «Hay fármacos que eran impensables hace unos años y ahora empezamos a tener inmunoterapias de nueva generación que dan un tratamiento que puede matar las células tumorales en la zona afectada. Hay mucha innovación y se va a traducir en posibilidades de supervivencia en los próximos años», asegura.

El cáncer de pulmón está muy ligado al tabaquismo. «Entre el 80 y 90% de los pacientes que vemos en la consulta son fumadores. Si erradicáramos el tabaco bajaría muchísimo el cáncer de pulmón, aunque hay pacientes que no han fumado nunca, pero han podido estar expuestos a un tabaco ambiental, en su trabajo o su familia, más otros factores como la polución, amianto, tóxicos, contaminación, lo que puede influir y condicionar», cuenta Nadal. «No todo el mundo tiene el mismo riesgo de desarrollar la enfermedad. Por eso tener ciudades más limpias va a reducir el riesgo de sufrir cáncer de pulmón. Las partículas que inhalamos causan inflamación en el pulmón que a la larga pueden ocasionar un tumor», destaca.

En torno a un 25% de los valencianos se declaran fumadores, una cifra en la media nacional y que es bastante constante, no suele variar con los años. «Es una enfermedad que tarda años en desarrollarse, es raro verla en gente joven. Seguimos teniendo un aumento progresivo de la enfermedad de un 3% anual, sigue creciendo. Hay una mayor concienciación de que el tabaco hace daño y en España cada vez se inician en el consumo a edades más tempranas, a los 13-14 años. Si hacemos prevención de evitar el tabaco, que es la principal causa de la enfermedad, se reduciría mucho su incidencia», destaca el especialista.