

Secciones
Servicios
Destacamos
El examen de Matemáticas Aplicadas de la prueba de selectividad ha vuelto a causar desasosiego en Valencia. Antes de que se terminara el tiempo ... de la prueba en los aularios de Tarongers ya había estudiantes que salían entre lágrimas del aula. Una chica se mostraba desconsolada: «En el ejercicio de probabilidad se han pasado. No creo que saque más de un tres».
No es la única con la misma reacción. La prueba ha resultado un auténtico fracaso a nivel general para los futuros universitarios que se examinaban. Lo primero que dice Arnau, otro de los estudiantes, es: «Ha salido todo el mundo llorando».
Según comentan, los ejercicios de probabilidad eran «muy difíciles». Cora dice: «El examen de matemáticas de ciencias era más fácil». Los futuros universitarios tenían una mezcla de tristeza y rabia al terminar. Lo único que les consuela es que esta noche «se lía», como dice Dani.
El joven es el más apenado de los entrevistados. Tiene un motivo: «Yo quería estudiar periodismo y ahora no sé si voy a entrar». Suele sacar sobresalientes en esta asignatura, pero ahora se espera un cuatro o un cinco.
Pero sin duda, lo que más molesta a los estudiantes es que las asignaturas específicas, es decir, aquellas que les ponderan el doble para sacar su nota global de acceso a la universidad sean las más difíciles.
Matemáticas Aplicadas ya fue objeto de polémica el año pasado. Como informó LAS PROVINCIAS, la dificultad del examen fue muy criticada por el alumnado, que se quejó especialmente de la redacción de los enunciados, que en algún caso llevaban a confusión, lo que obligó a dedicarles más tiempo y a limitar las posibilidades de responder todos los ejercicios. De los seis propuestos había que elegir tres. Las notas demostraron luego que los estudiantes tenían razón: la media de la nota fue la más baja en lo cuatro años previos: un 5,658 sobre 10.
No ha pasado lo mismo con el examen de matemáticas de ciencias, donde las reacciones han sido buenas. A la salida del aula de Tarongers, los estudiantes se unían con sus grupos de amigos, celebrando que ya comienza su verano y se pueden dar un respiro tras la selectividad. «Me lo esperaba más complicado», cuenta Zara sonriente.
La opinión es prácticamente consensuada, pero no todos han tenido la misma reacción al ver las preguntas del examen de matemáticas de ciencias. «Uno nada mas verlo ha preguntado cuándo se podía ir», comenta el grupo de chicos.
Pero todavía no se dan por satisfechos hasta que no se hagan públicas las notas. «Yo quería hacer medicina pero después de hacer el selectivo ya no sé si voy a entrar», confiesa un joven. Aun así, se lo toma con filosofía. No quiere dar nada por hecho hasta que no vea si ha logrado en la carrera de sus sueños. Sus amigos tienen fe en él: «Mientras todos estábamos con las piernas temblando a él lo veías escribiendo tan tranquilo. Seguro que lo consigue». El chico sonríe al ver que sus amigos tienen plena confianza en él.
Los estudiantes del bachillerato de ciencias sobre todo se quejan de los exámenes de física y de química. «Ni siquiera teníamos apuntes para algunas preguntas que hicieron», cuentan los chicos.
Pero también ha habido lágrimas. Jennifer sale del aula con todo el rímel corrido. Está muy disgustada. «No se podía sacar nada. Sólo salían cosas raras. Eso no estaba en mi temario», asegura presa del disgusto. La Selectividad no le ha ido como esperaba «y ahora no sé qué carrera voy a hacer».
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Los ríos Adaja y Cega, en nivel rojo a su paso por Valladolid
El Norte de Castilla
El rincón de Euskadi que te hará sentir en los Alpes suizos
El Diario Vasco
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.