La planta de residuos de Buñol lleva atascada año y medio y aún tardará meses

La planta de residuos sanitarios que la empresa Inizia Networks va a construir en Buñol no llegará a tiempo para paliar la crisis que la acumulación de estos residuos está provocando en los hospitales valencianos. Aún faltan varios meses para que entre en funcionamiento, según confirman desde el ayuntamiento de la localidad.

El problema es que la instalación podría haber entrado en funcionamiento hace tiempo, según explicaron desde el Consistorio de Buñol, ya que el expediente empezó a tramitarse en mayo de 2019 pero no fue hasta febrero del año pasado cuando se inició la exposición pública. La pandemia provocó un nuevo retraso y finalmente ha estado al menos medio año en las dependencias de la Conselleria de Emergencia Climática a la espera de que se le otorgara la declaración de impacto.

Fue el pasado viernes cuando la conselleria dio el impulso definitivo con la luz verde a la DIAen plena polémica por la acumulación de residuos en los hospitales valencianos.

La nueva planta que se construirá en Buñol será la mayor de toda la Comunitat y tendrá mayor capacidad que las dos existentes. Una de ellas se ubica en La Vall d'Uixó y puede tratar 1.376 toneladas anuales. La de Elche procesa 776.

La de Buñol podrá, en cambio, procesar cerca de 3.000 toneladas anuales ya que tiene una capacidad de 10 toneladas diarias con dos turnos de trabajo, como consta en la DIA

La instalación, además, será la única de las tres en la Comunitat que podrá almacenar residuos sanitarios de tipo IV. Las de La Vall y Elche únicamente están capacitadas para desechos de tipo III, los más comunes, que incluyen mascarillas, batas, equipos de protección... Los de tipo IV suponen un paso más y acumulan restos químicos y citológicos.

La parcela que acogerá la planta se ubica en el Polígono Industrial El Llano y tiene 2.479 metros cuadrados. La empresa remodelará las dos naves existentes para poder almacenar residuos sanitarios de tipo II, III y IV y el tratamiento de los de tipo III por medio de un autoclave. Después de su esterilización se triturarán y serán considerados como desechos urbanos susceptibles de ser enviados a un vertedero, en este caso el de Caudete. Los de tipo IV se trasladarán a otra instalación para su gestión.

La parcela podrá almacenar, por otro lado, 12.960 kilos de residuos sanitarios de tipo III y 11.340 de tipo IV.

La declaración de impacto destaca que la planta se construirá en una zona con riesgo de inundación. Este hecho ha obligado a la conselleria a pedir un nuevo informe que al final no se ha presentado. La DIA se concedió condicionando la instalación a que se apliquen medidas correctoras como que los residuos no se apilen sobre el suelo y que se construyan dos rampas para evitar la inundación de la nave.

El primer teniente de alcalde de Buñol y concejal de Urbanismo, Rafael Pérez, trató de tranquilizar a la población y señaló que se han tomado todas las garantías para que no hay ningún riesgo para los vecinos.

Pero la inquietud empieza a recorrer a los vecinos de la localidad que temen que en esta población se acumulen toneladas de residuos tóxicos.

La portavoz del PP de Buñol, Silvia López mostró su malestar porque el proyecto se ha tramitado «por la puerta de atrás, prácticamente sin darnos información». También evidenció su preocupación por si se van a incinerar estos residuos.

El portavoz de Sanidad del PP en Les Corts, José Juan Zaplana, denunció que la descoordinación entre PSPV y Compromís «la están pagando los valencianos y hacen que los problemas se cronifiquen». El diputado popular criticó que mientras no se encuentre una solución los desechos seguirán amontonándose en los hospitales valencianos.

Para Zaplana mientras continúa la división entre los dos partidos del Botànic el problema no se resuelve. «Medio Ambiente se pone de perfil y elude su responsabilidad porque parece que quiere tener poco que ver con las medidas adoptadas«, destacó el portavoz popular.