Las plazas de Educación Física e Infantil serán las más disputadas de la nueva oposición docente

El proceso selectivo se iniciará en junio, aunque la fecha de la primera prueba todavía está por determinar. Y volverá a ser normal después de un año marcado por las convocatorias excepcionales destinadas a estabilizar interinos, derivadas de la ley de medidas urgentes para reducir la temporalidad en el sector público. Dicho de otra manera, los aspirantes con más experiencia previa seguirán teniendo más opciones, pero no tantas como en el concurso de méritos extraordinario, que no incluyó exámenes, o en la oposición de Secundaria, con pruebas no eliminatorias, que se resolvió durante el verano de 2023.

Tal y como ha informado la Generalitat a través de un comunicado, la especialidad de Educación Infantil ha sumado 6.031 solicitudes para 548 plazas, lo que arroja una ratio de 11 aspirantes por cada una; la de Educación Primaria 5.036 para 517 (9,74); la de Pedagogía Terapéutica 1.977 para 382 (5,17); la de Audición y Lenguaje 1.194 para 188 (6,35); la de Inglés 971 para 182 (5,33); la de Educación Física 739 para sólo siete puestos (la ratio se dispara hasta 105,5); y la de Música 424 para 41 (10,34).

De todos los inscritos, prosiguen las mismas fuentes, 15.887 se presentan por acceso libre, 334 para conseguir una nueva especialidad y 151 son para las plazas reservadas a personas con diversidad funcional.

Las últimas oposiciones a maestros se celebraron en el año 2022, y sumaron 19.000 inscritos para 1.228 puestos. El descenso que experimenta la convocatoria actual se explica por la influencia del concurso de méritos de estabilización, que incluyó 2.667 plazas de maestros, en el sentido de que los seleccionados ya son funcionarios de carrera con plaza fija, lo que lógicamente se ha notado en términos de demanda.