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El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, en la rueda de prensa acompañado de los consellers Vicent Marzà y Ana Barceló. EFE/ Biel Alino
Puig apoya la opción del estado de alarma pero la descarta de momento

Puig apoya la opción del estado de alarma pero la descarta de momento

El presidente del Consell cree que da capacidad de autogobierno a las autonomías para que cada uno decida según la incidencia en su región

rocío escrihuela

Valencia

Miércoles, 26 de agosto 2020, 23:26

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha recogido el guante lanzado por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez para que las comunidades autónomas puedan solicitar el estado de alarma. Una decisión que el jefe del Estado anunció el martes y que desde el Consell han visto con buenos ojos ya que consideran que la situación de la pandemia no afecta igual a todas las autonomías y por tanto debe ser cada una de ellas quien decida si aplica o el estado de alarma. Una opción que de momento el jefe del Consell descarta solicitar para la Comunitat Valenciana que está en una "situación controlada, pero no satisfactoria"

Para Puig esta alternativa propuesta por Sánchez refuerza la "capacidad de autogobierno" de las autonomías y "la idea de cogobernanza"". Así se pronunció en una comparecencia pública en el Palau de la Generalitat tras una reunión con la consellera de Sanidad, Ana Barceló, y el conseller de Educación, Vicent Marzà, para ultimar el protocolo de los centros educativos y los alumnos ante el inicio de curso.

El presidente del Consell defendió la propuesta del Gobierno porque considera que la respuesta no puede ser unitaria para todas las autonomías porque los distintos territorios no pueden tener una respuesta ni "homogeneizadora" ni "unívoca". Para Puig este es el "camino correcto" y es un ejercicio de "democratización del Estado" y deben ser las comunidades autónomas las que "asuman sus competencias y trabajar en condiciones adecuadas para garantizar el funcionamiento del Estado". Puig salió en defensa de esta medida y de las críticas que ha recibido el presidente del Gobierno por quienes piensan que ha delegado su responsabilidad dejándolo todo en manos de las autonomías.

Tras la propuesta del presidente del Gobierno, el jefe del Consell considera que ya existe el mecanismo con "seguridad jurídica" para solicitar el estado de alarma. "Otra cosa es que se plantee con rigor y seriedad cómo hacemos frente a estas pandemias desde el punto de vista de la arquitectura jurídica; pero para las urgencias que estamos viviendo, ya tenemos cobertura para limitar algunos derechos constitucionales", añadió.

Sánchez abrió la vía para que las comunidades autónomas lo pidan, el Gobierno lo apoye y luego lo ratifique el Congreso de los Diputados y de ese modo dar luz verde a la petición individual de cada región dependiendo de la evolución de la pandemia, y no generalizar para todos los territorios, sino estudiar cada caso personalizado.

El presidente del Consell aboga por un estado de alarma con un confinamiento parcial o restricciones de movilidad

No obstante, Puig dejó claro que en estos momentos no es necesario pedir el estado de alarma para la Comunitat Valenciana, aunque no descartó que más adelante lo haga si es necesario para "garantizar la seguridad" de los valencianos.

Control de la situación

"Todo dependerá de la situación de la pandemia", añadió. Eso sí, dejó patente que las condiciones podrían no ser las mismas que hemos vivido hace unos meses. Puig optó porque se podría solicitar en vez de un confinamiento total, uno parcial o restricciones de movilidad, así como "confinamientos selectivos o limitaciones de libertad para encapsular brotes" en algunas zonas concretas.

"Se evaluará en función del problema que exista; pero si alguna comarca o ciudad necesitan restricciones, aplicaríamos la vía legal que se nos permite, que es la declaración del estado de alarma", señaló, y reiteró que el autogobierno es "fuerza de responsabilidad y la hemos asumido desde el principio".

El presidente del Consell insistió en que ahora mismo "no se dan las circunstancias para este planteamiento" y lo justificó con cifras en las que la Comunitat Valenciana está por debajo de la media de contagios que el resto de España. "El nivel de incidencia está por debajo de la media española y hay un control de la situación", agregó, tras detallar que la región tiene 87 casos por cada 100.00 habitantes, mientras que España casi 160, "el doble", apostilló Puig, para dejar patente que la situación que existe en la Comunitat es mejor.

El nivel de incidencia en la Comunitat está por debajo de la media con 87 casos por 100.000 habitantes, mientras España tiene 160

No obstante, matizó que es "complicada". "La Comunitat está peor de lo que nos gustaría, pero mejor que la media de España" y agradeció el "esfuerzo enorme" de los profesionales y de Salud Pública, con una prospectiva por PCR "altísima" y un nivel de asintomáticos "muy superior". "Cuando hay más pruebas se consigue ir controlando la situación desde la atención y detección precoz", señaló.

La Comunitat cuenta con 1.247 rastreadores y sólo contempla recurrir al Ejército «si es necesario»

La Comunitat cuenta actualmente con 1.247 rastreadores, según fuentes de la Conselleria de Sanidad, pero «si es necesario» recurrirá al Ejército para que se sume a esta labor, tras la oferta del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Así lo reconoció ayer el jefe del Consell, Ximo Puig con un «si necesitamos más, lo vamos a hacer», aunque defendió que la región es una de las que más rastreadores tiene.

Sin embargo los sindicatos reclaman más personal para desarrollar esta función. El secretario general del Sindicato Médico de la Comunitat Valenciana, Andrés Cánovas, se mostró crítico ante el anuncio del presidente del Gobierno. En su opinión, Sánchez «se podría haber quedado de vacaciones» porque todo lo que dijo fueron «estupideces y tonterías». Según recalcó, los rastreadores se deberían haber puesto mucho antes, «y no sólo 2.000 sino todos los posibles». Para Cánovas, España debería haber tomado ejemplo de otros países de Europa, «donde hay más».

El presidente provincial de CSIF Sanidad Valencia, Fernando García, señaló que su sindicato había determinado que eran necesarios 1.500 rastreadores y que aún no se había alcanzado esa cifra. Insistió en que deberían ser profesionales contratados por Sanidad pero que, en caso de urgencia, se debería recurrir a los del Ejército. Por su parte, Manel Canela, de CCOO, reconoció que lo ideal sería que se dispusiera de personal suficiente para desarrollar esa labor y así no tener que recurrir a la propuesta lanzada por Sánchez. No obstante, apuntó que «cualquier ayuda es buena».

Y Mª Luz Gascó, secretaria autonómica del sindicato de enfermería Satse, incidió en que hay que conseguir más personas que se encarguen de las tareas de rastreo porque habrá que intensificar el trabajo, ya que las personas se reúnen con más gente y hay más contactos que seguir.

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