Una pulsera para cada maltratador

«Seguimos sin poner el foco en el victimario. Ellos deben ser vigilados. Hay dispositivos de control para que se cumplan las órdenes de alejamiento. ¿Por qué no se utilizan las pulseras de alarma en cada maltratador?». Es la exigencia que plantea Chelo Álvarez, presidenta de la asociación Alanna que auxilia a víctimas de la violencia machista en nuestra región. Tras el último caso en Dénia, que suma siete asesinatos bajo esta tipología en nuestra Comunitat, la experta no alberga dudas: «Necesitamos un replanteamiento contundente», apremia. Mayte Lafuente, al frente de Amigas Supervivientes, rubrica la petición. «Es una de las medidas que no se están llevando a cabo todo lo que sería deseable».

El dispositivo sitúa y vincula por GPS las posiciones de víctimas y agresor y genera alarmas en caso de una aproximación entre ambos que exceda las distancias estipuladas en los alejamientos. Es por ello que ambas asociaciones destacan la importancia de la medida para lograr la máxima protección posible hacia las víctimas.

Según la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género, en agosto (último balance gubernamental) existían 181 de estos dispositivos en funcionamiento instalados a sospechosos de malos tratos como medida de protección. Pero no todas las mujeres que denuncian una agresión o amenaza cuentan con esta seguridad. El número de dispositivos es limitado y se emplean para casos de considerable riesgo para la víctima o denunciante. En el citado mes de agosto, los juzgados autorizaron 15 nuevas instalaciones, pero también acordaron desinstalarlo a 14 hombres que llevaban la pulsera de seguimiento. En toda España son 1.290 los aparatos activos.

Para Álvarez hay otra clave esencial: «Cuándo una mujer se arma de valor y denuncia, necesita que la atiendan con empatía suficiente para que la denuncia recoja, ya no un hecho puntual, sino todo lo que ha sufrido con su pareja». Y ahonda: «Si el sistema no se dota de personal experto en entresacar todo lo sucedido a lo largo del tiempo la valoración del riesgo seguirá fallando y nos seguirán asesinando».

Lafuente coincide en muchos aspectos: «Llevamos mucho tiempo urgiendo pulseras para todos los maltratadores. Todo lo que sea intentar proteger a la víctima debe llevarse a cabo». A pesar de resaltar su importancia, la presidenta de Amigas Supervivientes revela que a veces ni siquiera estos dispositivos son una completa garantía: «Conozco casos de agresores que se las han quitado hasta seis veces o las han roto y han desaparecido». En estos casos la víctima se queda «absolutamente paralizada y a la espera de la actuación de la policía. Es como si el maltratador le mandara un mensaje muy claro: 'sigo aquí y ahora te vas a enterar'», lamenta. Eso sí, «con mejoras y puliendo los fallos puede servir para prevenir asesinatos».

Un juzgado de Torrent ha fijado una orden de alejamiento para el policía nacional que el miércoles fue detenido en Paiporta por amenazar y lesionar presuntamente a su pareja. Así lo indicaron a Europa Press fuentes municipales. De manera preventiva, también se le ha privado del derecho a llevar armas.

La Policía Local de Paiporta recibió un aviso del 112. Una mujer residente en Murcia estaba preocupada porque no localizaba a su amiga, vecina del municipio y posible víctima de violencia de género por parte de su pareja.

Con la colaboración de la Guardia Civil, los agentes arrestaron al presunto agresor, requisaron su arma reglamentaria y protegieron a la víctima. Según las primeras diligencias, el agente bajo sospecha utilizó supuestamente su arma reglamentaria para amenazar a la víctima. Además, la Policía Nacional ha iniciado una investigación interna.